Me sumo a la propuesta juevera de esta semana que nos deja Tracy con un texto reeditado. Si se me ocurre algo nuevo, armo otra entrada.
MONEDA
Ante la urgencia del
caso
y sabiendo que no
quería
asumir las
consecuencias
de posibles
decisiones
resolvió convocar a
la suerte
para que le imponga al
vuelo
de una moneda
incierta
la responsabilidad,
que como niño esquiva,
en eso de tener que
optar
entre dos opciones:
de salir cara, haría
lo que debía
si fuera seca, sin
más dislates,
entre sombras se
desvanecería.
Gallina, en el fondo
-más de lo que se
asumía-
deseaba que la moneda
fuera la que lo
excusara
para escapar de lo que
temía.
Gira al vuelo la
fortuna
dando en el aire mil
volteretas
cae al suelo y allí
abajo
en su burla se
desliza
como trompo
hacia una alcantarilla.
-¡Decide tú,
cobarde!-
-¡Haz por una vez lo
que es debido!-
parece gritarle, en
silencio
desde el hueco, la
augur moneda.
-¡Ha salido seca!
¡Puedo verla!-
Miente sin culpas el
vil rastrero.
Mientras, desde lo
alto
arrojada como piedra
por otras manos innobles
cae en vilo otra
moneda,
corrigiendo así a la
suerte
que interviene como
rayo
estampándosele justo
en medio de la
frente.