NAVIDAD BLOGUERA

FIGURA Y FONDO

FIGURA Y FONDO
mi último proyecto

FLIN EN LA LIBRETITA

...un personaje nacido de mi mano...

Cartas que no fueron enviadas

..quedan invitados a conocer el blog de Eduardo, mi papá (que sigue vivo desde sus letras)

LADY DARK

un relato ilustrado

Seguidores

miércoles, 22 de abril de 2015

ESTE JUEVES UN RELATO: LA DESPEDIDA

Para sumarme a esta convocatoria juevera de la mano del querido Pepe, traigo la última parte de un cuento escrito hace ya bastante en forma de trilogía, en el que el personaje se despide de su existencia en una forma muy particular.


Imagen de mi autoría


(EL ÚLTIMO AMANECER)

Siempre creyó que la dependencia hacia otro ser le otorgaba un punto débil que no era bueno mostrar. A lo largo de los siglos, intentó más de una vez asirse de una compañera. Hermosas mujeres pasaron por sus colmillos convirtiéndolas con ese perverso ritual en seductoras criaturas de la noche.

Voluptuosas, inquietantes, bellas… pero en aquella transformación de mortal a vampiro, invariablemente la naturaleza humana se diluía y con ella el encanto que le había enamorado.

Con todas, al poco tiempo, se sentía decepcionado y sin ningún tipo de Piedad, volcando en ellas todo el rencor que sentía por su Desgracia, terminaba matándolas, atravesando con estacas sus corazones envenenados.

Sólo algunas noches lograba cierta tranquilidad, sobrevolando la inmensidad de un mundo que ya le era ajeno, sintiendo que su Existencia sobrehumana había logrado romper todos los Límites posibles, surcando los aires con lacónica melancolía intentaba en vano, recordar. Y en esos intentos, muy pocas veces, conseguía atraer a su memoria algunos fragmentos nimios de su vida pasada.

De improviso llegaban, como relámpagos, algunas imágenes de añoranza: un río, ciertos colores, el perfume de los jazmines en primavera, paseos en bote, el sonido de una risa contagiosa, la tranquilidad de las siestas de verano, la tibieza de una mano maternal sobre su frente, el azul de alguna mariposa, una enigmática melodía…

Solamente en aquellas contadas ocasiones el vampiro podía decir que se sentía cercano a la felicidad. O por lo menos, a algo muy parecido.

Esa sensación de dulce nostalgia que conseguía contadas veces durante aquellos vuelos nocturnos lograban emocionarlo, y por algunos momentos hasta –casi- se sentía reconciliado con el Universo. Era en esos momentos cuando en su interior, entre las telarañas de lo que albergara alguna vez su Alma, lograba entrever el fuego de su antigua poesía. Esos breves instantes de inspiración lograban henchir su corazón envilecido de algo muy cercano a la sensibilidad que, paradójicamente, desde siempre intentó aplastar.

Pero aquellos chispazos no alcanzaban para encender sus musas. Nunca lograba conseguir escribir una rima contundente, o arrancar de un instrumento una nota emotiva. Y eso lo frustraba, pobre Ser eternizado y marchito, desolado dentro de su esencia envilecida.

Entre sus pocos recuerdos a veces lograba rescatar la sensación de un amanecer. Allá lejos, perdido entre sus días de humanidad interrumpida, alguna vez había sido Feliz contemplando extasiado la luz de una aurora especial.

No sabía exactamente las circunstancias, no lograba establecer el por qué o el cuándo, pero intuía que aquellas luces que despertaban de entre las sombras, aquel renacer del nuevo día, alguna vez lo habían emocionado al punto de haberlo marcado profundamente, persistiendo aquella huella hasta en la que era, ahora, su inmortal identidad de vampiro.

Hundido en la sinrazón de lo que ya sentía como una vida inmortal insostenible, sin sentido y vacía, decidió al fin, acabar con su penuria.

Mirando hacia el naciente, esperando que el sol despuntara en el horizonte, a sabiendas que esa sería su hora postrera, contempló otra vez extasiado, aquel majestuoso espectáculo del amanecer entre el mar y la montaña.

Uno a uno, los colores fueron surgiendo, encendiendo la oscuridad de mil sensaciones reencontradas… con la magia de quien ve caer la noche como un gran velo, el vampiro retornó en ese instante, como si fuera en sueños, al rincón más amado de su infancia: Frente al mar, junto a la magnitud apabullante de las montañas, de la mano de sus padres y sus hermanos, revivió intensamente aquella vez en que viendo amanecer como nunca antes, aquel infante maravillado, supo que desde ese momento y para siempre sería, por sobre todas las cosas, poeta.

Mientras dos lágrimas, casi humanas, resbalaban por sus ojos enternecidos mientras recordaba, aquel Ser del submundo y de las sombras, ofrecía su Inmortalidad al Sol que se asomaba.

Desde el punto más alto de la montaña, mientras sentía que su esencia de vampiro se calcinaba, apenas con las fuerzas que le quedaban, recitó con arte sus últimos versos y extendiendo sus brazos como alas, dando un salto, se lanzó a volar…

20 comentarios:

Ester dijo...

La imagen es precioso y el relato sorprendente. Un abrazo

Tracy dijo...

Ahora hace falta que no vuele demasiado alto, no se le vayan a quemar las alas como a Ícaro.

Nino dijo...

Buenos días, Mónica:
Redoble de felicitaciones por tu relato y la imagen.
Me atrapa el rítmo que le has dado al relato, semejante a la manera pausada en que llega el amanecer hasta sorprendernos con su brillo. Y aplaudo ese final en libertad.
Un abrazo.

Pedro Ojeda Escudero dijo...

Una hermosa forma de decir adiós.
Besos.

Luciano Doti dijo...

Me encantan los relatos de vampiros, y éste es excelente.
Felicitaciones!

rosa_desastre dijo...

El amanecer a la vida...o a la muerte, puerta flanqueada por unos versos. Eternidad de poeta.
Un beso

Lucía m.escribanoblogsport.com dijo...

Un vampiro poeta, qué maravilla !
Al fin fué libre de volar hacia donde ansiaba.
Precioso relato Neo.
Disculpa la ausencia que se prolongó más de lo que yo deseaba.
Abrazos

yessykan dijo...

Te quedo genial. Un vampiro poetico, y con un final muy dramatico!
Muy buena la elaboracion.
Beso

Sindel Avefénix dijo...

Un final precioso, justo y poético, para una vida de salvajismo y maldad que lo dejó tan vacío, a pesar de la inmensidad de sus días.
La inmolación de su esencia, y de su destino.
Es perfecto Moni, te felicito!
Un beso enorme.

El Demiurgo de Hurlingham dijo...

Cuantos humanos se pareceran al vampiro, por perder motivación, por no poder disfrutar del placer.
En este caso es acentuado lo del vampiro, por no poder disfrutar de la compañía de las bellas mujeres. Creo que es más un defecto en él que una perdida de encanto de la mujeres.
No está bien darse por vencido.
Buen relato.

Unknown dijo...

Divino!! Es una historia bella, tierna, profunda...

Buenísimo tu relato, me encanta la humanidad de tu vampiro.

Muchos besos

Anónimo dijo...

Que buen relato... sobre todo con un gran final... bonita historia.... La imagen que lo acompaña es preciosa....
Muchos besinos!!

Manuel dijo...

La despedida de si mismo y de su esencia.
Realmente siempre he pensado que lo trágico del vampiro es saber que despedirá a todos sus seres queridos... y no queridos en aras de su inmortalidad.
Gran decisión la del vampiro de tu relato e inmejorable despedida como un canto al Sol naciente.
un beso

CARMEN ANDÚJAR dijo...

Me encantó este vampiro poeta. Has llevado este relato hasta un verdadero climax, con una gran riqueza de vocabulario, que respira poesía por todos sus poros.
Un abrazo

Anónimo dijo...

Desconozco si adquirió conscientemente su estado vampírico, pero sí que usó de su voluntad, de sus recuerdos, de sus anhelos de sentirse nuevamente poeta, para prescindir del mismo. Una despedida valiente.
Me ha encantado.

LAO dijo...

Para ser de vampiros ha sido una historia muy dulce Neogéminis... ¡me gustó!

Juan Carlos Celorio dijo...

¡Qué bueno! No creo que tenga nada que decir, tu relato es perfecto, precioso.
Besos.

Pablo dijo...

Hola; me acordé mucho de la mejor saga de vampiros que he leído, que es la de Anne Rice.

Y me ha gustado el texto porque no es un personaje sensiblero, sino una demostración que, más allá del estereotipo, hay color, más bien hubo vida. Algo que el vampiro quizás quiere decir...

Eso sí, también noto algo de condena en sus acciones asesinas.
Saludos. Pablo.

San dijo...

Redondo ese final Neo, para un texto pausado en el que dibujas cada escena mostrandola con suma claridad. Me gustó mucho.
Un abrazo.

Max Estrella dijo...

La eternidad también tiene sus inconvenientes. Me ha parecido genial la imagen de que, precisamente, sea un amanecer el que ponga fin a su vida...parece maravillosamente contradictorio...aunque bien mirado pudiera ser el nacimiento no de un día, sino de una nueva vida...
Besos

Archivo del blog

BLOG REGISTRADO

IBSN: Internet Blog Serial Number 1-958-000-000