Sumándome a mi propia propuesta, un delirio que surgió:
ESTIRPE
A todos, en algún
momento, se nos ha revelado nuestra existencia como algo particular,
intransferible y precioso. En mi caso, la revelación se
produjo una tarde de abril mientras hurgaba en el desván de la casa de mi
abuela, desempolvando en soledad viejos papeles, suvenires desgastados y fotos
amarillentas.
Rastros fieles de épocas y rostros lejanos, aquellos
testimonios se fueron abriendo ante mí con una coincidencia tan evidente que
cerca estuve de pensar que en realidad, alguien o algo -con manifiesta
intencionalidad- se las ingeniaba desde otro mundo en disponer ante mis ojos
aquellos registros, como un abanico de piezas claves previamente dispuestos
para completar por fin el rompecabezas de incógnitas que había sido -hasta
aquel momento- el origen y la naturaleza de mi familia.
De lo que fuera nuestras raíces sólo conocía algunos datos
genéricos, puntuales y desorganizados que poco y nada decían, más allá de lo
elemental sobre mis antepasados lejanos. Sus sueños, sus conflictos, sus
esperanzas, sus miedos antes de decidirse a emigrar, nada de todo eso había yo llegado
a conocer hasta esa tarde en que el destino quiso que confirmara mis sospechas.
Adelantados a su época debieron partir junto con lo poco que
consideraron esencial luego de malvender sus haciendas para comenzar lo que
sería un largo peregrinaje debido a la incomprensión de quienes respondieron
con odio y persecución a lo que sólo era búsqueda de conocimiento y reflexión
filosófica. Primero partieron hacia un lugar de nombre impronunciable más allá
de la frontera, más tarde cruzaron el mar, llegaron a estas tierras trayendo
sólo lo esencial, lo que por fortuna hoy llega hasta mí en este polvoriento desván como testimonio de lo que en mis genes
se conserva, aguardando ser potenciado y preservado en nombre de los más
elevada quintaesencia que le da sentido al alma humana.
Aquí, en estas páginas, con el encriptado trazo de quien se
sabe perseguido e incomprendido por la barbarie humana, se hallan reflejadas
las características de nuestra estirpe, tan temida como vilipendiada a lo largo
de la historia a causa de nuestro distintivo y sobrenatural talento: escudriñar
el corazón de la gente al punto de llegar a intuir a flor de piel sus más
oscuros pecados, sus penas pasadas, los riesgos futuros. Una cualidad tan
riesgosa como peligrosa, tan peculiar como complicada, tan angelical como demoníaca.
La habilidad de percibir -como más de alguna vez me pasara sin proponérmelo y
por puro temor no me animaba a aceptar y comprender- la íntima condición de las
personas con sólo mirar intensamente sus manos y sus ojos y así saber con
certeza, qué parte de Dios y qué proporción del Diablo se encierra en su
interior… para después, si así ellas mismas lo deciden, poder sobrellevar o
superar su destino mediante nuestra solícita intervención.
(para leer todos los relatos participantes, pasar por el post anterior)
30 comentarios:
Los punto y aparte de la vida acaban siendo, casos, aparentemente nimios, como subir a un desván y ver los rastros de nuestros orígenes. Haces un texto de introspección, de esperanza y de textura muy adecuados.
Un abrazo y a por un viernes soleado por dentro, sin telaraña alguna.
hurgar en los desvanes de nuestra memoria, encontrar el recuerdo perdido de los que nos antecedieron , descenderles del pedestal que nos les pusieron en esos vagos recuerdos que en tertulia familiar después de una cena,siendo niños, nos participaban de las desventuras, esfuerzos y fe en si mismos de aquellos que fueron y debemos en parte lo que somos, es una tarea regeneradora. saber de donde venimos para saber a dónde vamos. Hace pensar tu relato, no te deja indiferente Mónica. saludos agradecidos
Entrar en el pasado propio es una acción tan maravillosa como extraña, hay que estar preparados para cualquier sorpresa. Tu entras y sales de el con maestría de escritora. Un abrazo
Adentrarse en ése pasado que es hilo conductor de nuestra vida es necesario, diría que esencial para poder conocernos mejor en nuestro presente e intuir algo de lo que puede ser de nuestro pensamiento futuro. A veces la vida es como un guión establecido de antemano. Hay momentos que uno se sienta ante su vida como viendo una película, y es como una serendipia continua de escenas difusas que pasan desde siempre por nuestra cabeza.
Qué gran relato amiga. Qué manera tan sutil y elegante de narrar escenas y pensamientos.
Mis felicitaciones. Un abrazo.
A veces cuando nos ponemos a indagar sobre nuestras raíces descubrimos sin querer algo que nos sorprende. Incluso llegamos a pensar si de verdad somos nosotros en realidad.
Has hecho un texto acorde con tu elección del fragmente y nos has hecho participes de una historia de descubrimiento por medio dd papeles bien guardados en un baúl .
Muy lindo Neo, felicidades.
Abrazos y gracias.
Todos tenemos un pasado que nos enriquece con sus luces y sus sombras y llena de solera nuestras raíces. Siempre me gustó bucear en el mío, hablaba mucho con mi abuela y mis mayores, a pesar de ello, siempre me quedaron cosas por preguntar, pero con ciertas edades ni se te ocurre hacer esa preguntas y cuando las puedes hacer, es tarde porque ya no están los protagonistas.
me encantó tu relato y lo disfruté como si hubiera sido yo quien estaba en el desván encontrando esas auténticas joyas familiares.
Un beso enorme.
Te agradezco mucho x pasar y leer con atención Albada. Hasta cada rato 😁
Haces poesía hasta en tus comentarios Rodolfo!jeje. Muchas gracias 😊😚
Te agradezco mucho por tus cálidas palabras Ester. Un fuerte abrazo y gracias x tu constante compañía
Valoro mucho tu atenta lectura y comentario Jorge. Un abrazo y Muchas gracias
Muchas gracias Campirela. Te agrego tu cálido comentario. Un abrazo
Siempre hay profundidad en tus comentarios Tracy. Los valoro y agradezco mucho. Un abrazo y muchas gracias por pasar y leer con atención
Nosotros conservamos la historia familiar y he de reconocer que siendo nieta de 4 abuelos inmigrantes de Europa,-y además bruja-maga blanca con escoba incluida ;-) - me he sentido identificada con varias partes de tu magnífico relato. Y sí, tengo mi lado ¿delirante? Jaja
Beso enorme y gracias por anfitrionarnos esta vez.
Querida Myriam...celebro que hayas captado en totalidad el "delirio" de mi relato. Celebro también la feliz coincidencia con algunas pinceladas de tu propia historia familiar. Me siento muy gratificada. Un fuerte abrazo y gracias por tu constante compañía.
<un logrado aporte a tu jueves de relatos, muy a tu estilo, ahondando en el pasado familiar. Todo un descubrimiento.
Un abrazo.
Te agradezco Demi. Me alegra ir marcando un "estilo" un abrazo
En todos casi podría asegurar, pero sería muy arriesgada, que en nuestros antepasados oscuros y angelicales testimonios, de los cuales creo que si llegamos a tener acceso a ello, podremos descubrir el porque de muchas cosas.
En tu relato me imagino, que la percepción, la adivinación, y eso que se les revela de cada ser, a llegado a la protagonista cuando debía de llegar.
Me encantó.
Un abrazo Moni :)
Hablando de cosas pasadas, sin querer, revisando me encontré con las fotos de nuestro encuentro juevero, lindo recuerdo.
Tambien creo q las cosas llegan cuando deben, tanto desde el pasado como del futuro. Y no valen los intentos de alterar el tiempo en que deben ser. Suele ser contraproducente. Esas lindas fotos nos reflejan como éramos entonces..al menos para mi los años transcurridos me han agregado kilos y arrugas jaja pero vale evocar el momento 😁😁 un muy cálido abrazo. Te lo envío precisamente en mi cumple 😊😚
Gracias a ti, Mónica, y ¡ Muy feliz cumpleaños!. Qué tu ciclo sea magnífico en todo sentido. Besos y abrazos
😁😘🤗
Algo tiene esta frase y la de París, que nos ha inspirado a muchos, Moni.
Tienes una forma magistral de embaucarnos en tus historias, en sacar los instintos y las raíces.
El pasado es algo que no podemos anular de nuestra vida, a lo sumo, adormecerlo para que en su caso, no nos torture. La belleza de nuestros ancestros nos hace grandes y ser de donde seamos, nos hace volar. No hemos de renegar de lo que nos hace ser quienes somos.
Un beso enorme y gracias por estas letras.
Me has traslado a mi niñez, recordando al desván que tenía en mi casa cuando era pequeña, siempre los desvanes me han causado extrañeza, no sé... algo fuera de lo normal.
Todos guardamos en nuestra memoria el recuerdo del pasado.
Un placer leerte y participar en tu convocatoria, esperando otra siguiente tuya.
Un beso enorme.
Te agradezco y valoro cada una de tus palabras Mag. Me alegra que así sientas. Un abrazo y gracias por tu constante compañía.
=)
Te agradezco María por sumarte a esta convocatoria. El hecho de que hayan sido muchos quienes lo hicieron me alegra y gratifica. Un abrazo
EL BELLO DON Y ARTE DE LA QUIROMANCIA QUE ME ATRAPA Y ME ENCANTA, ASÍ COMO LEER EL TAROT O EL DE PERCIBIR PRESENCIAS EN ALGÚN LUGAR, MURA QUE ME HAN LEDO DOS VECES LAS MANOS DOS PERSONAS MUY DISTINTAS Y QUE NO SE CONOCÍAN
MARÍA LIBERONA
Me alegra que te haya gustado el tema María. un abrazo y gracias por pasar y leer.
Un poder peligroso el de esa familia. Y tener que rebuscar en el desván de su abuela los retazos de vida de sus antepasados para averiguar aquello que sus allegados no le han contado, sugiere que es un secreto que intentan sepultar.
Un texto fluido y claro, que se podría ampliar.
Un abrazo.👍
Agradezco cada una de tus palabras Ibso. Muchas gracias por pasar y leer con atención. Un fuerte abrazo
Cuándo hurgamos en nuestra memoria...tenemos que saber que tal vez no nos guste exactamente lo que nos encontremos.
Me has hecho reflexionar..
Un beso
Me alegra que haya sido así Amando. Un abrazo y muchas gracias por pasar y leer
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