Me sumo con esta historia a mi propia convocatoria. Para leer todos los relatos, pasar por el post anterior.
LO QUE SURJA
El hombrecito gris bebía su café meditando
sobre la chatura de su vida y la velocidad con la que le han pasado los años
sin que algo interesante altere su rutina monótona. Las perpetuas
postergaciones, sus innegables cobardías, la constricción impuesta por su
formación conservadora y religiosa, todo lo habían llevado a concluir que había
vivido equivocado.
Sumido en esos pensamientos
estaba cuando, por capricho del destino, un escueto papel arrastrado por el
viento se detuvo junto a la taza donde bebía su pena. El mensaje promisorio que
llevaba el volante fue interpretado como un recado personal que le quiso transmitir
el destino en ese momento de desazón y congoja: “Haga realidad sus fantasías,
sea ese otro que soñó y que nunca se animó a liberar” Dr. Cornelius, hipnólogo.
La dirección era cercana y casi sin dudarlo, se animó a visitar el lugar para
ver de qué se trataba la propuesta. La espontaneidad para tomar la decisión le pareció
un buen augurio. Jamás había resuelto nada por impulso, por lo que al llegar al
local en cuestión, lucía una leve sonrisa.
El Dr, Cornelius le dio una grata
impresión, cosa que aumentó cuando le comentó que el pago de honorarios sólo se
concretaba si el cliente quedaba satisfecho con el resultado obtenido. En forma
pormenorizada le explicó en qué consistía el tratamiento: primero se debía contestar
un cuestionario, luego se realizaba la operación hipnótica para provocar los
cambios deseados y sólo en ese momento -cuando se evidenciara la personalidad
que surgiera- se optaba por sí o por no para estabilizarla en forma definitiva.
Una vez asumida, nada podía revertir las modificaciones obtenidas.
Con entusiasmo evidente el hombrecito gris firmó el preacuerdo y comenzó a contestar cuidadosamente el cuestionario sobre las características a las que aspiraba: desprejuiciado, con facilidad de expresión, marcadamente seductor, notable autoestima, perseverancia, etc, etc. Una vez definido el sujeto en el que quería convertirse, fue conducido frente a un espejo especial en el que podría ver reflejado las consecuencias de cada cambio inducido. A medida que la hipnosis iba mostrando el boceto diseñado, su satisfacción se fue convirtiendo en derrota. Lo que surgió lo espantó por completo: había diseñado un monstruo egoísta, altanero y libertino que en nada se parecía a lo antes idealizado. O quizás sí… y lo que surgió le demostró que lo verdaderamente monstruoso lo llevaba desde siempre en su interior.
22 comentarios:
Creo que fue condicionado una vez más, como antes fue condicionado por las cuestiones conservadoras, las tradiciones de la familia. Y lo que creyó una señal del destino sólo fue algo casual, un papel cualquiera, sin relación con sus pensamientos.
Un abrazo.
Jajaja Muy bueno el relato Neo, intrigante...A veces no nos damos cuenta del moustro que llevamos dentro hasta mirarnos al espejo, mucho cuidado con lo que deseas a veces... Besos por ahí!!!
Muy bueno tu relato Mónica, él meditaba sobre su vida gris que quizá fue condicionada por su educación o tal vez no, solo era su personalidad, ese ser egoísta, lascivo que vio en la hipnosis quizá lo llevaba dentro y nunca se animó a soltar por esa educación recibida.
Me gustó, un abrazo.
PATRICIA F.
Me gusta el hipnotista y el servicio, pero que sea irreversible no se.... es muy riesgoso.
Una muy interesante manera de interpretarlo. Gracias Demiurgo. Un abrazo
Y nos engañamos al idealizar vidas ajenas que soñamos emular. Gracias Mariana. Un abrazo
Me alegra que te gustara Patricia. Un abrazo y muchas gracias por leer con atención
Exacto. A veces uno cree que otra vida sería mejor que la que tenemos, pero no siempre lo que se sueña es tan gratificante como parece de lejos. Un abrazo y muchas gracias por leer José
Me ha gustado mucho ala vez que ha dado en qué pensar.
Besos
Misión cumplida entonces, Tracy jeje. Un abrazo y muchas gracias
En ocasiones no nos damos cuenta del error de aquello que anhelamos hasta que no vemos nuestro auténtico yo reflejado, mostrándote el horror de lo que eres en realidad. Me encantó Mónica, un excelente relato. Un fuerte abrazo
Intenté expresar justamente eso, Nuria. Muchas gracias por leer. Me alegra que te gustara.
Muy bueno también el uso de lo que surgió, y de do de surgió.
Tengo entendido que en otra vida este hombre fue más valiente y arrojado y en una ocasión se arrojó en paracaídas, y no sé abrió. Siempre creemos que lo no vivido fue mejor, y será como mucho un 50/50
abrszoooo
Es cierto. Solemos imaginar que la vida de los otros es mucho mejor que la nuestra y no es así. A todos nos toca cargar penas. Un abrazo, Gabi, muchas gracias por leer con atención
Aunque parece cuento, la verdad es que muchas veces las personas son asi...desean ser lo que no son, y muchas veces la realidad es que no son como creen....y a veces la realidad supera cualquiera de las fantasias que se sueñan...que susto se llevaria ese hombre...bss
Así es, diva. Solemos engañarnos con lo que idealizamos. Muchas gracias por leer. Un abrazo y buena semana!
El exceso es que es malo siempre. Si quería ser un triunfador sin más....era muy poco, y muy fácil, pero lo has llevado de manera excelente.
Un abrazo, para el Dr Cornelius otro :-)
¡Es el resultado de tomar la vía "fácil"! Si se lo hubiera trabajado, quizás se habría convertido en lo que tanto aspiraba, y no en un monstruo.
Me gustó mucho tanto el relato como la convocatoria. Gracias por anfitrionar, Moni.
Un placer regresar.
Un besazo
Me alegro y lo agradezco, Dafne. Muchas gracias por ser parte celebrando tu retorno. Un abrazo
Jaja... Serán dados! Muchas gracias Albada por su compañía. Un fuerte abrazo
Pues a lo mejor fue así, que lo que surgió ya lo llevaba en su interior.
Un placer disfrutar de tu relato, Neo, y enhorabuena por el éxito que ha tenido tu convocatoria, no he podido leeros antes, así que a partir de ahora me pongo a ello.
Besos.
Me alegra que te gustara. Muchas gracias por sumarte, María. Un abrazo
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