Me sumo con este texto a la convocatoria juevera de esta semana. Pasar por el blog de Artesanos de la Palabra para leer todos los aportes. (si hay alguna expresión que no entienden, me avisan! jeje)
-Seguro te la acordás, de melena larga y lacia, que se peinaba siempre con
una trenza hacia el costado- le dijo el de bigote mal cortado al otro, pelado y
panzón.
-¿La que siempre iba de jeans ajustados y tenía loco al flaco porque ni lo
miraba cuando íbamos al club?-
-¡Esa! ¿te acordás lo linda que era, con esos ojos gigantes, siempre atenta
a todo lo que pasaba alrededor, festejando los chistes del Mauro como si fuera
un cómico de televisión?-
-¡Siií! ¡me la acuerdo! Era la primera en engancharse cuando se organizaba alguna
joda o alguien salía con la idea de hacerse la rata el día que el de biología iba
a tomar lección!
-Bueno, me la encontré el otro día en la fila del banco. Nos reconocimos en
seguida ¡como si nos hubiéramos visto ayer! Bueno, en realidad la que primero
me llamó la atención y me la hizo recordar fue la que terminó siendo la nieta ¡Es
igual! El mismo color de pelo, los mismos ojos, la misma silueta delgada
bamboleándose como un junco… preciosa. Cuando le dijo ¨abuela Cata¨ me di
cuenta ¡Ahí caí! Era ella, la misma Catalina que nos volvía locos a todos!
-¿Y te reconoció? ¡Mirá que vos cambiaste mucho desde aquella época! ¡Si no
siguiéramos siendo vecinos y te viera por la calle después de cuarenta años no
te reconocería!
-¡Cincuenta!-
-¿qué?-
-¡Cincuenta años pasaron de aquella
época!-
-¡Joder¡ ¡cómo vuela el tiempo, mirá vos…! Y ella ¿qué tal? ¿se acordó de
vos?-
-Al principio no me ubicaba. Debió pensar que era algún vivo que quería iniciar
conversación, pero al final se acordó y terminamos recordando a todos los de la
banda. Me contó que la gorda Susana murió hace poco. La atropelló un colectivo, justo cuando iba al sanatorio a conocer a su primer nieto, pobre. ¡Qué garrón!
-¿La gorda Susana? ¿La viuda del Tito? ¡Pobre mina! ¡qué mala suerte tuvo esa
familia!
-El que también anda bastante cachuzo es Lozano, ¿te acordás? Resulta que
la hija de Catalina estuvo en pareja con el hijo de Lozano mucho tiempo y que
por eso todavía las familias se siguen viendo y están al tanto de las
novedades. De ahí que me contara que el pobre anda con problemas serios de
próstata y buscaba un buen especialista. Justo me acordé de lo bien que te está
tratando el tuyo y le pasé el nombre para que se lo recomendara ¿Barletta se
llama? ¡Ya veo que me confundí y le dije cualquiera!
-¡Noo! ¡Barlera se llama! ¡Bartetta es el cardiólogo que te operó, no te
acordás? Me parece que la vejez te está dando fuerte, flaco! Jajaja
-Bueno, no importa. Suerte que me dio el teléfono. La nieta me lo agendó en
el celu. Le mando un whatsapp para aclararle que me equivoqué en el nombre y de
paso la llamo. Uno nunca sabe. En una de esas, mensaje va, mensaje llega… ¡y
reavivamos la flama! ¿ No te parece jajaja?
2 comentarios:
Qué diálogo más curioso, me gusta la forma de conversar , hay, cosas que entiendo otras me las puedo imaginar por el contexto, pero es muy lindo .
La vida pasa más deprisa de lo que pensamos , y los recuerdos mientras están vivos es como si fuera ese instante.
La vida , hay que ver todo lo que acontece a lo largo de ella. Me has puesto nostálgica ajja. Un besote.
Me encanta el acento que has usado, le ha dado chispa, pero el encuentro, recordar tiempos y personas, eso ha resultado bonito y amable, un dialogo maravilloso. Abrazos
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