Me sumo con un texto ya publicado a la convocatoria que esta semana nos deja Campirela desde su blog. Pasar por allí para leer todos los aportes.
HÉROES SIN CAPA
Cuando pensamos en héroes, quizás
por influencia de las historietas y el cine, nos imaginamos a seres
excepcionales, (quizás hasta con algún poder especial, si abarcamos con esa
término a aquellos superhéroes de fantasía) que se destacan entre el resto de
los mortales por su actitud esforzada y valiente, casi sin debilidades, capaces
de arriesgar su vida para salvar la de otros.
No muy a menudo se piensa en los
héroes como seres normales, con virtudes pero también con defectos, con flaquezas,
miedos y complejos, hasta con rencores y miserias.
Quizás lo más meritorio en
cuestiones de heroísmos sea precisamente la capacidad de vencer los miedos
naturales y no la carencia de los mismos. Mantenerse en la lucha, a pesar del
cansancio.
No sería de demasiada valía el
arrojo de alguien que se supiera indestructible, al contrario, es de mucho
mayor mérito el saberse vulnerable igual que cualquier hijo de vecino y a pesar
del lógico instinto de supervivencia, decidirse a arriesgarlo todo por una causa
justa, un ideal o por evitar el dolor de un semejante. Mucho más valioso si el
amenazado es alguien totalmente ajeno a nosotros y si el riesgo no lleva
implícito recompensa alguna.
Pensar que cada uno de nosotros,
seres rayanos con la masiva normalidad, puede llegar a constituirse por alguna
extraña razón en un héroe o algo parecido es algo que no se piensa
frecuentemente.
Pero si lo analizamos desde el
punto de vista del transcurrir de la historia de nuestras sociedades, se puede
llegar a la idea de que gracias al esfuerzo y la lucha cotidiana de miles de
seres anónimos (que jamás tendrán expectativa de sobresalir por sus virtudes de
entre sus pares también anónimos) la humanidad sigue, a pesar de todo, andando
y evolucionando. Se puede entonces aceptar el hecho de que se trata de
verdaderos héroes, porque su entrega no tiene mayor recompensa, porque
continúan esforzándose a pesar de las injusticias, aún en contra de lo que se
podría suponer debido a la explotación a que desde siempre han sido sometidos por
aquellas minorías que sobreviven gracias a que ellos siguen, con su esfuerzo,
manteniendo en funcionamiento los engranajes de nuestro mundo sin que la cruda
realidad mate sus esperanzas.
Siguiendo ese razonamiento
podemos concluir que se es héroe cuando se continúa educando a pesar de que no
se construyen escuelas, se es héroe si se sigue yendo a la fábrica aún a
sabiendas del magro salario, se es héroe si se sigue luchando contra el
desalojo aun cuando no exista esperanza de tener un techo propio, se es un
verdadero héroe si no se deja la responsabilidad de la tarea asignada aunque su
existencia sea menospreciada, se es héroe si se decide seguir teniendo
esperanzas en un mundo donde el engaño es la moneda corriente, donde el que
roba vive mejor que el que nunca lo ha hecho, se es, en definitiva un verdadero
héroe si se sigue apostando por la vida aunque casi nunca sonría la suerte.
8 comentarios:
Estuve pensando en el tema y no recuerdo cuando comenzaron a crearse los heroes con caracteristicas poco comun, es decir las capas, los trajes de aspecto circence, el fisico de musculatura exagerada, y las caracteristicas sobrehumanas.
en contraste a esa tendencia tenemos los ejemplos de comedia, como Don Quijote, que horico, si pero como burla al heroe de caballeria (que ya comenzaba a perfilar al heroe como un sujeto lleno de habilidades fuera de lo comun) o el Chapulin colorado (tambien en lo comico)
si, es curioso que si uno quita al heroe las capas y la fuerza, termina en la comedia... es raro ¿no?
pienso y pienso y creo que en la antiguedad fue cuando al heroe lo volvieron alguien fuera de lo comun, con esos mitos de tipos como perseo, ulises, etc....
y las heroinas.... ufff eso ya es tema de mil futuros jueveros.....
Tu relato ha dado otra perspectiva a esos héroes anónimos que cada mañana se levantan a las cinco de la madrugada y trabajan hasta que la puesta del sol, por un miserable sueldo , para llenar la cazuela de papas.
Todos en alguna medida llevamos ese héroe , unos ayudando al prójimo y otros a sí mismos.
Me ha gustado el enfoque , deja una buena reflexión. Un besazo y muchas gracias por este aporte .
Un buen texto. Bravo.
Aprecio el héroe que actúa según la razón, sin arrebatos, que se esfuerza y nos demuestra cuán grande es la virtud y la voluntad.
Salud.
Buen relato y mi enhorabuena y apoyo a tantos y tantos héroes anónimos que hay por ahí. Un abrazo
Creo que ese tipo de gente a la larga tiene algunas alegrías o recompensas, me gusta pensar en el karma y en la justicia divina. Saludos!
Hola Mónica, yo creo que el hecho de enfrentarse diariamente a la vida que este mundo provoca es ya un actor heroico, por lo tanto todos somos un poco héroes, cada cual a su manera y como puede, pero héroes. Un abrazo
El héroe de verdad nunca se hace público. Miento. Si sabemos de "héroes" es porque fueron inventados desde las primeras epopeyas. Luego, puede creer o no creer en ellos. Pero desde luego desconfía de quienes ensalzan a los héroes. Los otros, simplemente son los esforzados, los que ponen la carne en el asador o ante el cañón, sin ellos los héroes que pasaron a la posteridad no serían nombrados.
So yo le hablara de mi vida en algunas circunstancias podría decir que dí muchas cosas por España pero, hace tanto tiempo de eso, que no quiero que la magia se rompa.
Un saludo de Buscador
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