Del aspecto del fotógrafo no
recuerdo nada, por supuesto. Seguramente tendría gorra y pantalones anchos y
hasta quizás un par de bigotitos como era la usanza de la época. Acarrearía sobre
sus hombros enormes cámaras fotográficas, de distintos formatos, destinadas a remarcar
su profesionalismo.
Sí tengo presente la sensación
del momento, el lugar, el rumor del mar mezclado con el de la gente.
Recuerdo el color del vestido de
mi mamá, la calidez de esas manos en las mías. Recuerdo bien el peinado de mi
abuela, sujetándose los cabellos por detrás, con dos peinetas.
No recuerdo si era de tarde o de
mañana pero sí el placer que me producían esas pausadas caminatas por aquella
rambla marplatense, de la que conservo grabada en mi retina hasta la textura de
las baldosas.
Tampoco tengo presente por qué no
se fotografiaron mi papá y mi abuelo, que estaban por allí. Supongo que quizás aprovecharon
para una breve incursión al casino que abría sus puertas desde temprano.
Por los datos de la fotografía
puedo evocar los años que llevaba a cuestas, apenas dos… y mi capacidad de
asombro intacta.
Recuerdo que después de varios
días las fotos nos fueron enviadas al hotel donde nos alojábamos. Sorprendió lo
rápido que se manejaba aquel hombre que debía revelar y enviar las copias
antes que los turistas dieran fin a su descanso y volvieran a su lugar y sus
rutinas.
Sin conocerlo, sin tener más
datos de él que lo que consta en el marco de la foto, hoy le agradezco
infinitamente por la calidad de su trabajo. Gracias a su técnica y habilidades para fotografiar puedo conservar con nitidez la sonrisa de mi mamá, el gesto de mi abuela –que no
solía mostrarse tan adusta- y una irreconocible muestra de lo que fui cuando
apenas comenzaba a andar por este mundo de complejas contradicciones.
Más relatos y fotografías, en lo de Alfredo
Más relatos y fotografías, en lo de Alfredo
15 comentarios:
Elegiste muy bien la foto sobre la cual contar. Eso podría esperarse con tu experiencia en el tema.
Muy emotiva.
Y leyendote, parece que tu capacidad de asombro sigue intacta. Sumada a la capacidad de asombrar a quienes te leemos.
Muchas gracias, Demiurgo. Me emocionan tus palabras.
=)
Neo, tu relato es encantador. Con que poder tan especial has narrado tu relato, que me ha emocionado desde su primera letra hasta la última. Imagino que la magia esta en esa hermosa fotografía que aun conservas intacta.
Besos
Muy bonita fotocomo lo es el modo en que la has recordado.
Besos.
La rambla marplatense es un clásico para todos los que visitamos la costa alguna vez y esas fotos típicas de la época siguen conservando la magia de esos momentos, donde era todo tan diferente. Una foto en sepia por el tiempo, pero cuyos recuerdos conservan todos los colores del momento.
Me encantó conocerte pequeñita, un amor!
Besos :)
Preciosas estas fotos que nos traen esos momentos de nuestra infancia en la que todo nos asombraba. ¡Cuántos recuerdos te traen!¡Y qué bien descritos! Me encanta tu detallismo.
Ya unos años después, habiendo andado un tanto por este mundo de complejas contradicciones (¡qué rotundidad esta última línea!¡qué contraste con la liviandad del recuerdo y la inocencia infantil)... decía que unos años después, tú eres la artífice de esas maravillosas fotos en que reúnes a jueveros cada Navidad. Gracias por tu constancia y generosidad... en un par de esas fotos estoy yo... gratos recuerdos ahora para mí. Un fuerte abrazo y besos Mónica
¡Qué ternura!me has conmovido.
Mónica yo tengo una foto muy parecida de un fotógrafo que en aquellos años fotografió a la mayoría de los vecinos de mi ciudad, todos con el mismo fondo, la calle que era el paseo habitual. Me ha encantado, como siempre, tu forma de relatar aquel recuerdo. Y la foto es un tesoro que seguro guardas con mucho cariño.
Un beso
Gracias a tod@s, chic@s por la emotividad de sus comentarios
=)
Que bonito recuerdo Neo, tres generaciones cogidas de la mano. Si resulta emotiva la imagen.
Besos.
Qué foto tan entrañable y que mona estabas con ese vestidito tan corto. Es una maravilla contar con estas fotografías que nos hacen evocar sensaciones de nuestra infancia¡ Un beso
Pues sí, diligencia y precisión que ha superado el paso del tiempo. Un excelente trabajo y un excelente relato que nos transporta años atrás.
Ampliando la foto se aprecian unos detalles magníficos.
Un beso y gracias por participar.
Esas dos manos que te llevaron por los caminos de la niñez, hilo conductor de sentimientos, con los que has madurado y conservado como un tesoro.
Un beso
Estupendo recuerdo y foto de tres generaciones de mujeres, seguro que geniales como la que lo cuenta.
Un beso
De haber coincidido tú y yo en un mismo lugar y tiempo, con las mismas edades, ya que, y ahora que lo pienso, no se la tuya, y si que la supe en su momento, de seguro que te hubieras enamorado de mi belleza. Toma ya!!!
Medio beso con 15 o mas de retraso.
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