Dedicatoria póstuma para nuestra amiga, María del Carmen Nazer
Como ave, María…
Como ave
que se eleva al cielo
a todos nos llega
al final la hora
de emprender el vuelo.
Y como es sabido
cada quien elige
en su vida el modo
de realizar su vuelo.
Y tu modo, María
ha sido etéreo
a través del juego
poético y libre
de las palabras,
de esas dulces
palabras
que seguirán flotando,
volando siempre,
como recuerdo vivo
de tu pura esencia
y tu alma cándida.
Más palabras de despedida en el blog de Sindel.
Bellisimo, Moni! Me hiciste emocionar mucho, tus versos son hermosos para nuestra dulce compañera. Gracias por tus palabras, por tu homenaje, seguramente desde donde esté se sentirá feliz de habernos dejado tanto cariño y tanta luz.
ResponderEliminarUn beso enorme.
Que emoción nos has hecho sentir con tus palabras y ademas has conjugado el cariño a María del Carmen con el titulo que nos da Sindel, Eres estupenda. Un abrazo
ResponderEliminarUn alma tan cálida, tan grande, tan dulce, el alma de María del Carmen que nos ha dejado y hoy lloramos todos por su ausencia.
ResponderEliminarD.E.P.
Un beso.
Qué bello homenaje. Descanse en paz.
ResponderEliminarMuy bonito homenaje, Mónica. Y es justo así... yo no he conocido en mi vida nadie con más candidez que ella. ¡Cuánto la hemos querido!
ResponderEliminarMil gracias por tus palabras.
Un beso grande :)
Te dejo mi homenaje y un enlace en él para que veas o descargues su libro.
http://vientodepaz.blogspot.com.es/2016/07/un-hada-abre-las-alas_22.html
Un hermoso homenaje lleno de cariño.
ResponderEliminarBesos
Hola Neo: Que bonito verso el que le has dedicado a nuestra amiga Maria del Carmen Nazer. Seguro que ella lo apreciará porque era una poeta de los pies a la cabeza.
ResponderEliminarUn alma sensible como pocas. D.E.P.
Mónica, ella se sentía gorrión de la vida y al final ha volado dejándonos su canto en sus poemas. Estoy segura que estará feliz con todos nuestros homenajes...Ojalá goce de la plenitud que merecía.
ResponderEliminarMi abrazo y mi cariño, amiga.
M.Jesús
Precioso poema, merecedora sin duda de toda alabanza por su ternura y estar.
ResponderEliminarUn abrazo