Sumándome nuevamente a la propuesta semanal de Sindel
CIELOS E INFIERNOS
Intransferiblemente
cada quien siente su cielo
como también sus infiernos.
Aprendiendo mientras vive,
con sus dioses incluidos,
carga demonios por dentro.
Indefectiblemente
cada quien los lleva a cuestas,
aunque proponga destierros,
porque convive con ellos
desde el momento que nace
hasta que se cubre de suelo.
Malos o buenos, los unos,
como los otros lo quieran,
cielos e infiernos se adiestran
aunque pelean por dentro.
Sometiendo viejos miedos
y evaluando las ventajas
cada quien busca en su vida
la forma de soportarlos.
Excelente! Un poema precioso, con tanta verdad que deja pensando al que lo lee.
ResponderEliminarSiempre me soprendes, Moni, genialmente por supuesto.
Hay que aprender a convivir con todo eso que tenemos dentro y elegir lo que más nos reconforte y nos haga sentir vivos.
Un beso enorme.
Es curioso que empiezas con el cielo en singular y los infiernos en plural, pero como luego defiendes que de todo tenemos y por todo pasamos y en nosotros reside la opción de elegir. Y todo lo dices en un poema precioso bien estructurado. Un abrazote
ResponderEliminarCreo que esta es una buena forma
ResponderEliminarde emprender un crecimiento personal.
Besos
Nos acompañan siempre, por supuesto.
ResponderEliminarUn beso.
Hemos de llegar a una entente entre el cielo y el infierno, poruqe así es la vida,una lucha de equilibrios, como tú bien has descrito en tu poema.
ResponderEliminarUn abrazo
El cielo y el infierno está dentro de nosotros mismos.
ResponderEliminarEl infierno son los demás, dicen.
ResponderEliminarSi es así, entonces,
en los demás también, debiera estar el cielo...
pucha, no vale descubrir los defectos de uno, jejeje
ResponderEliminar,
hablando en serio, ¡excelente!!
el poema tiene vida propia, me lo imagino con el fondo musical de LA CORDA-Violín Romático muy, pero muy bajito y al periodista Alejandro APO como decidor
.
saludos
Mónica, claro, conciso y rotundo...Cada cual transporta su cielo y su infierno y cuando es consciente de ello, comienza a elegir lo que le conviene para seguir su camino con ánimo y en paz consigo mismo...
ResponderEliminarMi felicitación y mi abrazo por este buen poema.
M.Jesús
Hola Mónica, tanto el cielo como el infierno son parte de nosotros.
ResponderEliminarBesos amiga.
Mónica me encantó tu descripción en lo que es cada ser humano convertiendo su paso terrenal en su propio cielo e infierno, Un placer leerte como siempre que lo hago.
ResponderEliminarUn beso Marta
En la mochila de la espalda llevamos todos gran variedad de ellos, amiga mia.
ResponderEliminarBeso.
No hay nada peor que los propios infiernos en los cielos o creerse que no nos excomulgamos de nuestras propias decadencias.
ResponderEliminarUn poema lleno de fuerza, la verdad. Estaba leyendo unos poemas de Baudelaire y te aseguro que ha sido como una continuación.
Besos.
Siempre es un placer leerte. Te felicito.
ResponderEliminarUn abrazo.