Los reclamos más rotundos de los que no tienen voz suelen
hacerse en silencio. Con miradas hondas y almas tristes que no comprenden ni
los qué ni los por qué, que no tienen idea ni de los inicios ni del hasta cuándo. No saben ellos las
razones, sólo las padecen. No son culpables de las barbaries, sólo son siempre las
víctimas. Y con su silencio, la impugnación de la estupidez humana se hace
contundente. Crece sin palabras. No hacen falta gritos. No se requieren discursos
ni grandilocuencias ni publicidades.
Más silencios que dicen mucho, en lo de Matices.
Son silencios que dejan huella.
ResponderEliminarSi pudiéramos traducir todos los silencios que de sorpresas nos llevaríamos...
ResponderEliminarUn abrazo.
Muy buena temática elegiste dentro de las múltiples posibilidades que nos ha sugerido el silencio.
ResponderEliminarBreve y precisamente por ello muy directo y contundente, silencios que gritan a voces injusticias inexplicables, y es que el sufrir más hondo es inexplicable, por tanto como darles voz, ni nombre, solo el silencio es capaz de explicarlo, me ha gustado mucho tu relato, tiene la expontaneidad de la rabia por esos silencios que dicen tanto, miles de besosssssssss
ResponderEliminarSilencios rotundos.
ResponderEliminarUn abrazo.
Terribles silencios, que muchas veces no son interpretados.
ResponderEliminarUn beso!
Son los más graves,pero a los que menos atención prestamos...lo contrario el ruido y la algarada nos hacen mirar más a menudo...
ResponderEliminarSilencios profundos los que nos expones este jueves. Besos.
ResponderEliminarEsta clase de silencios son los que mas afectan a la humanidad.
ResponderEliminarBesos
Los peores silencios, los que no se entienden ni se quieren entender.
ResponderEliminarUn abrazo
Desgarradora verdad que nos hace callar y a veces, mirar para otro lado.
ResponderEliminarUn beso
Sus silencios gritan pero nadie parece oírlos.
ResponderEliminarUn beso.
El silencio habla con los cinco sentidos, y bien que lo has expresado Mónica. Muy buen escrito. Un fuerte abrazo y buen fin de semana.
ResponderEliminarTwitter: @Pepe_Lasala
Un digno y sentido homenaje a los que no tienen voz, a los desfavorecidos y olvidados de la sociedad...Muy bueno, Mónica. Mi felicitación y mi abrazo grande.
ResponderEliminarM.Jesús
Un discurso que de tan expresivo se oye. Pero sigue dejando irremisiblemente al silencio con sus victimas.
ResponderEliminarBesos
Me gustó tu recuerdo hacia esos sin voz, que sufren las acciones de otros.
ResponderEliminarIba a comentar más, pero solo repetiría palabras que tu dijiste.
Besos.
Si no hay fuerzas, si cansado estas, si no ves posibilidad de comunicar, el silencio es tu aliado.
ResponderEliminarMuy buen tributo,
Besos muy cariñosos
tRamos
Me llevaste a la cantidad de mujeres asesinadas a manos de sus parejas o ex-parejas, ellas ya callaron para siempre. O a la de vpalizas y violaciones que no se cuentan por temor o por vergüenza.
ResponderEliminarMuy bien esa denuncia, amiga.
Un texto contundente, con las palabras justas para alertar, buscar respuestas, tratar de entender, por qué tanta injusticia?
ResponderEliminarBesos!
Gaby*
Me alegro que trates sobre el habla la mirada, un habla silenciosa pero tan eficaz como la palabra hablada. Un beso
ResponderEliminarSerán silencios o será que que oímos lo que queremos y lo que nos interesa y que hay voces que no nos interesa escuchar?
ResponderEliminarMuy bueno tu conciso pero directo, con las voces y los silencios justos!
Besos!
Si a todos esos silencios los dotáramos de voz, la tierra temblaría y se quebraría como una frágil copa de cristal. ¡Son tantos!.
ResponderEliminarUn fuerte abrazo.
Dolorosos silencios, esos que no se miran de frenten, porque de hacerlo la culpa se instalaria en el alma.
ResponderEliminarMuy bueno este toque de atención Neo.
Un abrazo.