domingo, 2 de septiembre de 2012

ANIVERSARIO

"La muerte no es nada. Yo sólo me he ido a la habitación de al lado. Yo soy yo, tú eres tú. Lo que éramos el uno para el otro, lo seguimos siendo. Llámame por el nombre por el que me has llamado siempre, háblame como siempre lo has hecho. No lo hagas con un tono diferente, de manera solemne o triste. Sigue riéndote de lo que nos hacía reír juntos. Que se pronuncie mi nombre en casa como siempre lo ha sido, sin énfasis ninguno, sin rastro de sombra. La vida es lo que siempre ha sido. El hilo  no está cortado. ¿Por qué estaría yo fuera de tu mente, simplemente porque estoy fuera de tu vista? Te espero....No estoy lejos, justo del otro lado del camino...Ves, todo va bien. Volverás a encontrar mi corazón, volverás a encontrar mi ternura acentuada. Enjuga tus lágrimas y no llores si me amas".

San Agustín.

15 comentarios:

  1. Coincido al 100 %.
    El hilo,no está cortado.

    Buena forma de recordar.

    Mi respeto.


    PD: la vocalista me recordó mucho a Tarja Turunen

    ResponderEliminar
  2. espero que no te enfades conmigo, pero me parece haberlo leído en otro lugar, quizás algún lapsus brutos de mi parte o alguna química de haber cruzado el umbral del tiempo y he retrocedido, talvez mi mente anoche visitó tu blog adelantándose al tiempo y al espacio, de cualquier manera pido perdón por todo lo que he expresado.... son líneas muy inspiradoras, reales, palpables, como la vida, como la muerte misma.... son palabras que te hacen soñar con un mundo paralelo donde puedes refugiarte cuando la oscuridad te atrape, una escapatoria a un lugar donde el sueño cobra vida y lo es todo, en un tiempo que no existe y donde todo es posible..... besos!!!!!

    ResponderEliminar
  3. Seguro que lo leíste antes Luis. Es una estupendo texto según dicen, de San Agustín.
    Gracias a ambos por sus palabras.

    ResponderEliminar
  4. No cabe duda de que aquellos a los que amamos están siempre presentes,

    ResponderEliminar
  5. Me ha faaltado la ilustración. Preciosas, bueno no es el calificativo adecuado, mejor decir exquisitas sobre todo la de las alas cortas.
    No se si es cierto que se perdura, ni siuqiera si tiene importancia perdurar. Los que nos recuerdan tambien desaparecen y poco apoco nos vamos desvaneciendo. Aun así, ¿merece la pena vivir?
    Un abrazo

    ResponderEliminar
  6. Nuestras personas amadas podran alejarse por unos días o para siempre, pero jamás se rompen los lazos que nos unen, ni muere el amor que nos dimos.
    Todo mi cariño Neo.

    ResponderEliminar
  7. Ah, pues no tengo yo mucha confianza en don Agustín, pero he de reconocer que es una hermosa teoría... que yo no puedo poner en práctica. Duele.

    Un beso.

    ResponderEliminar
  8. Al volver a mi blog he visto esta actualización. Son unas palabras que confortan, me he quedado un tanto asombrada de que ya pasara un año. Yo comparto lo que dicen, los que parten es como si se fueran a otro lugar, yo no los olvido, y cuando el dolor se calma, siento que no se fueron del todo, algo de ellos queda con nosotros. Un beso grande.

    ResponderEliminar
  9. ¿Por qué estaría yo fuera de tu mente, simplemente porque estoy fuera de tu vista?
    Está todo dicho, me has emocionado mucho. Gracias un beso grande por tu emotiva entrada que me sensibilizó, diría demasiado...

    ResponderEliminar
  10. Seguro que nuestros ausentes están presentes en nuestra vida. Que ellos nos recuerden desde el otro lado, ya es otro cantar.
    El texto es precioso y desprende amor por los cuatro costados.
    Un beso

    Salud y República

    ResponderEliminar
  11. No puede ser de otro modo. Tanto amor persiste, está.

    un fuertísimo abrazo.

    ResponderEliminar
  12. El recuerdo está siempre dentro de uno cuando lo recordado merece la pena.
    Un abrazo.

    ResponderEliminar
  13. Un texto precioso. Las personas a quienes amamos siempre están ahí, en nuestro recuerdo, de alguna u otra manera. San Agustín lo expresó de manera magistral.

    Un abrazo

    ResponderEliminar
  14. Los seres que amamos no se van para ciempre. Un gran abrazo amiga.

    ResponderEliminar