miércoles, 10 de mayo de 2023

CADA JUEVES, UN RELATO: LAS PUERTAS DEL CIELO

Sumándome a la propuesta juevera de esta semana que nos deja Campirela desde su blog, me ha surgido el siguiente texto a partir del cuento homónimo de Julio Cortázar que quizás conozcan. Me disculpo por haberme excedido en la cantidad de palabras y los invito a leer todos los relatos participantes.



LAS PUERTAS DEL CIELO (inspirado levemente en el cuento de Cortázar)

Los observo afanarse todas las mañanas, presurosos, cada quien ensimismado en la estrecha chatura que le ha tocado en suerte y no puedo dejar de sentir cierta ternura y conmiseración al verlos contentarse con tan poco. No es que no valore su esfuerzo cotidiano y su filosofía de no pretender más que lo que puedan lograr sin molestar al otro, pero viéndolos desde mi perspectiva de quien ha logrado despegar, no puedo dejar de pensar que su extrema sencillez, lejos de resultar una virtud, a la larga termina siendo un contrapeso indeseable en esa oquedad que habitan. Es sano tener una cuota de ambición. Es bueno esmerarse en dar un salto más alto de lo esperable. Si bien no está garantizado el éxito, al menos la posibilidad de avanzar está latente y saber que existe esa opción resulta, en sí mismo, una motivación para hacernos sentir diferente. Pero no la advierto en ellos. Apenas logro verles algún destello que los encienda cuando están de fiesta, como esta noche, sumergidos en esta sonora melancolía que contagia. Bajo las luces parpadeantes de la pista, arrinconado en una mesa junto al escenario, veo que ya se ha ubicado la orquesta. La melodía dulzona comienza a levitar junto a la enredadera florecida que penetra -con su esencia- la rancia realidad que se disipa mientras comienzan a llegar los bailantes en pareja o en pequeños grupos, vestidos todos con sus mejores galas. Ellos, enfundados en el único traje que reseñan como dominguero, -disimuladas las hebras sueltas y alguna mancha porfiada que se ha negado a desaparecer con la nafta blanca- ensayan poses de compadrito sosteniendo con desdén el cigarrillo tosco recién encendido. Ellas, mientras tanto, empolvadas y enjugadas  generosamente en agua de colonia, avanzan como gatas en celo, encaramadas con gracia sobre los tacones aguja con los que intentan forzar una estatura que las iguale a las modelos estilizadas de las revistas.  Mientras el alcohol, la música y el humo comienzan a unificar los rostros, empiezo a verlos como monstruos: especie indescifrable de caricaturas trazadas con gruesos trazos, entreveradas en sus sudores intentando reinventarse en medio de un paraíso que me sabe a infierno. Siento que no pertenezco a todo aquello. Aunque les entiendo los gestos, las palabras y las muecas, compruebo que entre ellos existen otros códigos, lenguajes sugeridos que les elevan sin que yo pueda alcanzarlos. Me siento excluido, relegado, imperfecto. Caigo en la cuenta que ellos al fin han logrado entrar en el cielo mientras yo, macerado en otras prioridades, me he quedado definitivamente atrás.


27 comentarios:

  1. Un reañismo mágico muy de Cortázar, y me ha necantado. Soy apasionada de Rayuela, un modelo para armar, pero su cuentos... es que no hay ninguno que me deje indiferente.

    Un abrazo

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    1. Coincido. Tiene una magia muy particular que, si bien no pretendo emular, sirvió para inspirarme. Me alegra que te gustara Albada. Muchas gracias por tu visita. Un abrazo

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  2. Es posiblemente el menos reconocible de sus cuentos, menos ácido, aunque las clases sociales y su pugna y el modo dan pistas. Tu texto es muy claro las puertas son importantes dependiendo de quien las cierra. Un abrazo

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    1. Me gustó esa evolución en la mirada respecto a la gente sencilla que en un comienzo parece menospreciar y que en el final reconoce casi envidiar. Muchas gracias por leer, Ester. Un abrazo

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  3. Extraños y extrañados de otros mundos, por las puertas que nuestra biografía nos fue levantando.
    Un abrazo.

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    1. Mundos distintos que parecen convivir en una misma realidad pero que al final se vuelven lejanos. Gracias por la visita, julio. Un abrazo

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  4. No conozco el cuento, pero se ve claramente que en él trata la diferencia de las clases sociales, y en este caso hay un hombre que se afana en su trabajo, pero nunca lograra estar a la altura quien sabe si no es mejor, hay clases sociales que solo son eso sociales.
    Me gusta cuando se realza el esfuerzo de las personas por querer llegar alto no saben que en el intento ellos tal vez sean más felices.
    Un besote y muchas gracias por este texto.

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    1. De eso trata el cuento, Campi. Con maestría se muestra esa actitud discriminadora de quien se considera superior pero que en realidad reconoce y envidia el mérito de quienes son felices aún en lo sencillo. Fue un gusto participar de tu convocatoria. Un fuerte abrazo

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  5. Hola Neo, no conozco ese cuento, sí al autor. Tu texto es claro, trata en profundidad y objetivamente el valor del esfuerzo, llegar a metas...
    Me encanta, como todo lo que escribes.
    Que tengas un estupendo fin de semana.
    Un beso.

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  6. Hola Neo! Con tu fantástica descripción nos has sumergido en tal peculiar escena, con su especial ambiente y sus personajes! Indicándonos que el protagonista no encaja nada, para bien o para mal, con el resto! Me ha encantado tu relato! Un abrazote!

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    1. Me alegra que te haya gustado, Marifelita. El cuento de Cortázar es el que realmente nos mete en la piel de los personajes. Sólo quise hacer referencia a esa situación dual que el protagonista experimenta. Un abrazo y muchas gracias por leer

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  7. Si parece que hay varios clubs.... incluso al morir esas distinciones de castas tambien parecen existir.... la otra vida pues es mas de lo mismo que ya tuvimos aqui, pero mas intensificado.

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    1. Hola José. No pensé en esa simbología, pero puede darse. El cuento pretende hablar de esas realidades en las que con poco y en condiciones que a los ojos de otros hasta parecerían despreciables, para lis habitues resultan el paraíso. Un abrazo y muchas gracias por leer

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  8. Has cogido a un buen maestro y ceo que estaría orgulloso del relato que te inspiró.
    Un abrazo.

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    1. Te agradezco los conceptos, Tracy. Muchísimas gracias por leer. Un fuerte abrazo

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  9. Me gusta que hayas usado ese cuente como inspiración, bien logrado.
    Y cumpliste con la confocatoria.
    Un abrazo.

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    1. Me alegra y te agradezco Demiurgo. Me estimula tu comentario. Un abrazo y gracias otra vez

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  10. ¡Qué buen texto! Tan bien delineada la atmósfera decadente y la descripción e introspección de la voz narradora. Me encantó y dejó pensando. Beso enorme, Moni.

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    1. Celebro que te haya gustado. Muchísimas gracias por ser tan buena receptora. Un fuerte abrazo, Myriam. Que sigas bien

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  11. PD. ¡Me has incentivado a volver a leer a Cortázar!

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  12. Me empezó a caer mal desde el principio. O sea mal. Despreciar la sencillez no tiene nada que ver con ser ambicioso. No veia la relacion con la puerta, y cuando algo se me escapa voy a ver lo que ha comentado Ester, que nunca se le escapa nada, y ya me queda claro.
    coincidimos en el formato narrativo todoseguidoenunparrafosinpuntosyaparte.
    abrazoo, Mónica

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    1. Jeje. Así es. El personaje, tomado del cuento de Cortázar, es un abogado con un concepto de clase muy despectivo hacia la gente sencilla. Se cree superior y poco valora la forma de vida de gente con la que se rodea pero que menosprecia con sutileza. Pese a todo, logra ver qué en ciertos momentos, esos mismos que ve con desdén, son los que logran hallar su paraíso, o sea llegan a la puerta que el quisiera atravesar. Gracias por tu sinceridad y la atenta lectura, Gabiliante. Un abrazo

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  13. Cortázar me encanta y tu cuento te ha quedado excelente, felicitaciones, saludos.
    PATRICIA F.

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    1. Bienvenida Patricia. Me alegra encontrarte por acá! Muchas gracias por pasar y comentar. Un abrazo

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  14. fue la envidia el pecado origen del parricidio de Abel por Caín, ese cainismo lo hemos llevado en nuestro ADN de manera insoportable, No ! no puedes no debes escalar aquello que es mi sueño. Muy bonita y buena entrada Neo Un abrazo

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    1. Envidia. Si, muy antiguo ese pecado y atinada tu observación. Y hoy en día se suele ejercer de múltiples formas y casi sin filtros. Gracias por leer Rodolfo. Un abrazo

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