jueves, 13 de mayo de 2021

CADA JUEVES UN RELATO: EL SÍNDROME DE LA CABAÑA

Sumándome a mi propia convocatoria:



EL SÍNDROME DE LA CABAÑA

En el interior de mi burbuja, sigo en pie. Pese a todo. Después de todo. En soledad absoluta, aislado de lo que fue, de lo que será o puede haber sobrevivido más allá del cristal que me contiene.

El refugio que me acoge lo he construido junto a un abismo, con una alta atalaya desde donde dominar los confines de un horizonte al que le temo. No tengo idea si aún existe algo bueno en lo que llamaba antes mundo exterior y hoy apenas reconozco como un mar de sombras, un universo informe de mil enemigos que me acechan buscando despojarme de lo poco que atesoro.

Diariamente, siguiendo mi rutina de sobrevivencia, reviso mi cabaña buscando sellar cualquier fisura que pueda aparecer en la frágil estructura en la que me aíslo. Temo que pueda escapar por ella un sueño importante o entrar, en cambio, una duda insidiosa queriendo infectarme. Los peligros son miles, y pocas mis reservas para enfrentarlos; pero lo intento. Nadie puede decir que no lo intento. Mi vida es esto ahora, una continua lucha por mantenerme a salvo de los peligros que otros llaman normalidad y a mí me aterrorizan.

Es que ya nada reconozco de lo que existe allá afuera. Me siento muy confundido. Aquí en lo alto, aislado de todo, me he ocupado de resguardar sólo para mí contadas cosas, en medio de este breve prado de ternuras recordadas mecidas por soplos de un viento que no alcanzo a identificar, asido al único árbol por el que suelo trepar, soñado vislumbrar el cielo desgastado de mi fe.

Justo antes del crepúsculo, en ese preciso instante en que el sol parece diluirse en su sangre roja, alcanzo a divisar entre las nubes la silueta de un ave que me sobrevuela, amenazante. Intuyo que es la impiadosa locura que me roza. Es entonces cuando desesperado cierro las puertas de mi cabaña sin hacer ruido, apago las luces y corro las cortinas para que no me vea y piense que ya me he muerto. Intento -como puedo- engañarla. Hasta ahora no lo consigo.


* Para leer todos los textos participantes, pasar por el post anterior.

34 comentarios:

  1. El ritmo y el tema son impresionaste. Un texto de naúfrago en tierra, con toda la lucha en marcha.

    Impactante. Un abrazo grande, anfitriona

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  2. ¡SENSACIONAL!
    Creo que sobran más palabras.
    Un abrazo :)

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    1. Ahh... Me pongo colorada! Muchas gracias Volarela. Me alegra que te gustara. Un abrazo

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  3. Madre mia, que escalofrío me recorre la espalada, el aislamiento voluntario con el miedo pegado en la piel, lo contrario de la razón. Un final genial. Abrazucos

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    1. Me alegra t estimula tu comentario Ester. Muchísimas gracias.

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  4. Es un texto donde el protagonista se aísla voluntariamente y es consecuente de su soledad y la admite. El mundo de antes ya no le interesa hasta tal puto que deja de reconocerlo , solo espera que crean que ya no esta aquí en la tierra y nadie le persiga. Creas un ambiente de intrigante. Un fuerte abrazo y muy feliz fin de semana.

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    1. Me inspiró esa imagen surrealista que representa en forma muy simbólica lo que ese trastorno significa. Me alegra que te gustara Campirela. Un abrazo y muchas gracias por pasar y leer con atención

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  5. Ha de esconderse del mundo, y en su atalaya encuentra su salvación y su futuro aislado del peligro que encierra el mundo exterior. Se hace patente su angustia y su desconcierto. Un relato genial que no hace más que redundar en lo fácil que te resulta ser a la par que locuaz en los argumentos concisa en la posición de cada protagonista de tus historias.
    Me encanta leerte.
    Un abrazo y gracias por compartir tus letras.

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    1. Muchísimas gracias Jorge. Me siento halagada y estimulada por tus generosas palabras. Siempre es un placer recibirte

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  6. Rizas el rizo de la imaginación en este impactante escrito. Está visto que de lo que no se podrá nunca aislar es del miedo a la muerte y tu lo muestras con una esquemática, pero brillante utilización de tu prosa.
    Besos.

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    1. Muchas gracias Juan. No sabes cuánto me alegran tus palabras! Un fuerte abrazo

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  7. Platón y su caverna de sombras en el anverso de tu relato. ël sombra proyectadas , tu personaje una burbuja de cristal que te perdíte contemplar un desolado paisaje sólo interrumpido por un ser necesario para la paz de su mente.
    Ha sido necesaria tanta prisión? el tiempo lo dirá, pero un año robado no hay quien lo revuelva. Un abrazo

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    1. Una pregunta que tiene tantas respuestas como afectados. Muchas gracias por tu constante compañía Rodolfo. Un fuerte abrazo

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  8. Estos lugares que nos protegen del mundo exterior parecen buenos y malos, nunca he sabido si la mente misma es en si una CABAÑA. Aqui nos muestras un poco a un sobreviviente de un desastre de marca mayor, no lo culpo de querer estar al margen de todo.

    Te ha quedado una composicion magnifica

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    1. Muchísimas gracias José. Concuerdo en que la mente es capaz de construir las cárceles más terribles como también los refugios más Liberadores . Un abrazo y muchas gracias por pasar y leer

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  9. Leyendo tu excelente relato, pensaba que la sociedad en la que vivimos ( por el momento casi todo paralizado) ofrece tantas opciones para elegir, que muchas veces somos nosotros mismos los culpables de querer abarcar todo .
    Nos agobiamos, nos complicamos la vida...

    La pandemia nos ha hecho reflexionar, y espero que hayamos aprendido a ser más selectivos con las prioridades...

    Un abrazo y feliz fin de semana...🌺🌸

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    1. Buena reflexión, Berta. Me alegra que mi texto te lo haya sugerido un abrazo y muchas gracias por pasar y leer

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  10. Un texto magistral que nos hace reflexionar.
    Pienso que si la pandemia ha tenido algo positivo es hacernos meter os no sólo en nuestras casas sino en nuestro interior y enfrantarnos con los miedos y todos los inquilinos que tenemos dentro.
    Y e. Esa lucha hay que procurar ganar.
    Un texto enriquecedor. Gracias.

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    1. Me gustó eso de los inquilinos interiores jeje... Da para escribir algo sustancioso 😉 muchas gracias por tu visita y comentario Tracy

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  11. Inquietante como intrigante. ¿Qué le habrá pasado al personaje, que ha desarrollado tan extremo temor? Algo que es motivo de su encierro.
    Un abrazo.

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    1. Uno advierte que está encerrado cuando le falta el aire, pero no siempre comprende cómo, cuándo o por qué quedó atrapado. Gracias por la atenta lectura. Un abrazo

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  12. Vive textualmente en una burbuja, puede tener miedo a salir de ella pero lo más probable es que se sienta cómodo en ella. Muy bueno Monica, besos.

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  13. Muchas gracias Moli. como dije más arriba en otro comentario, me inspiré en la imagen que tan bien acompaña el tema de la convocatoria. Un besito y gracias por pasar y leer

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  14. Le comentaba a Campi que creo que este sindrome no es uan enfermedad diagnosticable, sino un acostumbramiuento, pero tu personaje, tal como se expresa y describe sus sensaciones entra claramente en la paranoia (dijo el aprendiz de sicólogo jeje).
    Me estoy dando cuenta, al hilo del texto de Montse, que me esta empezando a molestar el uso de la palabra "normalidad", odiosa de por sí antes de la pandemia, ha alcanzado cotas de "odiosidad" insospechadas con el virus, y no hablemos de su superlativo :nuevanormalidad.
    besosss MÓNICA

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    1. Tal cual se me ocurre que cada quien se va acostumbrando a nuevas rutinas, nuevos miedos, nuevos imposiciones y responde en función de sus propias falencias y/o fortalezas. Siempre es un placer tenerte por aquí. Gabiliante. Muchas gracias

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  15. Obviamente no es una crítica. Es una paranoia mia.
    ...Y abrazos

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  16. Creo que la impiadosa locura hace tiempo que anido en la burbuja.
    Me ha encantado, con tu permiso me quedo leyendo por aquí.
    Un saludo.

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    1. Has sabido interpretarlo Ángel 😉. Me alegra recibirte y que te gustara. Muchas gracias. Un abrazo y buena semana!

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  17. Has descrito maravillosamente la locura y la lucha interior... Un disfrute de texto.
    Gracias por la convocatoria.
    Bss

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    1. Me alegra que te gustara Sylvia. Muchas gracias por sumarte. Un abrazo

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  18. No hay luz apagada ni cortina corrida que burle al miedo o a la locura. Intuyo que esa burbuja (muy bella según la describes) en la cual se ha recluido, acabará con el.
    Bss.

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    1. Creo también que su final está marcado en ese aislamiento. Gracias Mar por leer y participar. Un abrazo y buen fin de semana

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