Nuevamente nos encontramos para otro encuentro juevero, esta vez, desde el blog de Mar, quien nos deja la elección del tema a nuestro libre albedrío.
LIBRE ALBEDRÍO
Así, viendo quedamente el fluir del río
con sus camalotes flotando en la tarde
sumisos y verdes bordando la orilla
-con la displicencia que exponen las cosas
que, sin dejar huella, transcurren los días-
mirando de lejos sin buscar la causa
uno, al observarlos, diría -de pronto-
que casi nada hace, ese agua que fluye,
por variar en algo lo que es su designio.
Pero de repente, observando de cerca
y abriendo con ansias los ojos del alma
uno ciertamente, mirando las aguas
advierte en el curso que lleva ese río
ciertas osadías, fluyendo constante
y sin hacer alarde, que elevan su vida:
las piedras que horada y el lecho que funda
las hojas que lleva y los signos que traza
en su breve paso dibujando espumas.
Los peces que acoge, las aves que guía
las gotas que deja llorando en su borde
para que sepamos lo que le ha dolido.
Los cielos que espeja, la nutria que baña
las voces que inspira –bogando- poesía
los sauces que besa a medida que pasa
la sangre que evoca mil viejas heridas.
Aromas que lleva de tierra que empapa
el barro que amasa en humedal sombrío
el sol que le dora la senda que alfombra
con juncos que teje con agua dormida.
Es mucho lo que él hace, al tiempo que fluye
no es poco su gesto marcando camino.
Decide en qué curva despeja o desborda
si riega un remanso o si crece su impulso.
Elige a su gusto las olas que pulsa
resuelve, si corre por nuevos desvíos
si inunda, si ahoga o si apenas salpica.
Si canta, o susurra, si calla o si mece
la imagen redonda -detrás de una nube-
de luna amarilla que sueña encendida.
El río que hoy pasa, bien sabe qué quiere
escoge sus pausas con libre albedrío
si bien, cauce abajo… es mar su destino.
El río, a pesar de estar encajonado, por el mismo cauce y el tiempo, tiene la esencia del libre albedrío.
ResponderEliminarSí señora, muy bueno. Un abrazo y feliz jueves
Te agradezco mucho por pasar y leer Albada. Un abrazo
EliminarMiramos un río pero no vemos todo lo que has visto tu, una vida recorre el cauce sin ordenar con la libertad de decisión propia. El poema es magnifico se lee con ritmo. Un abrazo
ResponderEliminarGracias Ester. Quise hablar de la amplia gama de posibilidades que se tiene durante el transcurso de la vida, a pesar de saber que el destino final es irrevocable. Un abrazo
EliminarMe ha gustado mucho el poema que le has dedicado a ese rió, que en él fluye tantas cosas y tanta vida, en él que se sabe que su fin es desembocar en otra masa grande agua, como es el mar ..precioso .
ResponderEliminarAbrazos Neo ..muy feliz jueves.
Me alegra que te gustara va. Un abrazo y Muchas gracias
EliminarMe sugiere tu poema el río de la vida, que nos lleva encauzados al final de un eterno mar. Precioso.
ResponderEliminarGracias por participar.
Bss.
Un río en el q podemos decidir muchas cosas durante su trayecto...y eso marcará la diferencia. Muchas gracias Mar. Un abrazo
EliminarMe ha encantado tú poema. Fluido como discurren los ríos más hermosos del mundo, como fluye la vida entre meandros y abruptos designios.
ResponderEliminarComo siempre, tu saber hacer con las letras, es como disfrutar de un menú de primera categoría.
Un abrazo y gracias por compartir tu talento.
Muy generoso tu comentario Jorge. Muchísimas gracias. Un Fuerte abrazo
EliminarEntiendo tu río como la propia existencia de cada uno...desde la libertad sigue el camino...hasta que desemboca...y el camino no es más que la multitud de decisiones que vamos adoptando...
ResponderEliminarInteresante aportación
Un beso
Me alegra que te gustara y que haya yo sabido hacerme entender. Un abrazo y muchas gracias por pasar y leer con atención
EliminarLA VIDA. Sencillamente, el devenir y el fluir de la vida. Un río, con su cauce, las normas que nos indican una vida en sociedad, las aguas que somos nosotros y los demás... las aguas quese suman, nuestros pasos y la mano que tendemos, los otros...
ResponderEliminarRealmente, eso me ha hecho sentir tu poema. El recorrido desde el manantial hasta, a veces, el mar.
Un beso enorme, Moni.
Esa era la idea que quería transmitir! Me alegra haberlo conseguido. Muchas gracias Mag por tus palabras. Un fuerte abrazo
Eliminarme ha gustado mucho cómo defiendes el libre albedrío fijándote en el agua que va fluyendo a lo largo de su cauce.
ResponderEliminarMuy bueno.
Besos fuertes.
Muchas gracias Tracy. Me alegra que te gustara. Un abrazo
EliminarEl río que sigue su cauce, el de la vida, llevando las aguas algunas veces con tempestad otras con calma.
ResponderEliminarMe ha encantado tu poema, es enriquecedor, muy buena tu aportación.
Un beso enorme.
Te agradezco María por tus palabras. Un abrazo
EliminarY es que el río se deja fluir, se escapa, se va con una total libertad. Bella poesía, besos.
ResponderEliminarMe alegra que te gustara Moli. Muchísimas gracias por pasar y leer. Un fuerte abrazo
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ResponderEliminarEse rio maltratado por todo, donde la contaminación lo ensucia, los incendios lo contaminan y los humanos envenenan y no lo cuidan bien.
No me extrañaría que decidiese esconderse bajo tierra.
Cuidemos los ríos..Buen relato
Beso
S
Buen mensaje el tuyo
ResponderEliminar=) Gracias por pasar!
Una mirada más profunda a la vida y a la naturaleza, fluimos con un poco de libertad
ResponderEliminarAbrazo
Todo depende de la fuerza con la que enfrentamos nuestras circunstancias. Un abrazo y muchas gracias por pasar y leer Mujer de negro
EliminarHoy nos transladas a Esa Arcadia que cada cuál llevamos creada en nuestra mente. Hoy la Naturaleza la protagonista que nos lleva de tu mano haciendo un repaso a cada estadio, a cada átomo que te rodea, escrito en tu libertad en la libertad que nos hace diferenciar del resto de los seres creados.
ResponderEliminarPoder elegir, sin condicionamientos ser responsables de nuestros actos u omisiones, es una tarea rutinaria o de un gran esfuerzo decisivo alguna veces, pero es en esa situación cuando somos dignos al Creador
Agradezco cada una de tus sentidas palabras Rodolfo. Son conmovedoras. Me alegra que te haya llegado el relato en el sentido que quise darle. Un abrazo y Muchas gracias por pasar y leer con atención, como siempre lo haces.😁
EliminarBuenísimo. Un cierre excelente el de esos últimos versos para un poema que al principio me ha recordado a Heráclito y el devenir.
ResponderEliminarCon tu permiso me quedo encantada en tu rincón.
Un abrazo.
Me alegra tenerte por aquí Rebeca. Tuve problemas para dejar comentario en tu blog. Espero de ahora en más hallar la forma 😁 un abrazo y muchas gracias por pasar y leer con atención
EliminarLa naturaleza, siempre de alguna manera nos enseña cual es el camino, todos llegan de alguna manera al mar, a otros les costara mas, lindo poema, me ha encantado.
ResponderEliminarAbrazo Moni :)
Muchas gracias Ceci. Me alegra que te gustara. Un beso
EliminarMe ha encantado tu poema, Mónica, con el río como
ResponderEliminarmetáfora de la vida. ¡Es precioso!.
Besos enormes, poeta.
Te agradezco tus palabras Myriam. Siempre valoro especialmente tus comentarios. Un fuerte abrazo. Que sigas bien.
EliminarPreciosos el fluir de tus versos lo mismo que ese rio que va hacia el mar. Un beso
ResponderEliminarMe alegra que te gustara María José. Muchas gracias. Un abrazo
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