lunes, 5 de noviembre de 2012

ENCUENTRO
















Mirada irredenta…
profunda sorpresa.
Perfume en el aire
e hipnótica huella.
Quietud de un minuto
con brillo de estrellas.
Vibrante contacto
de inciertas certezas.
Presencia envolvente
de diáfano vuelo.
Impase sin nostalgias
ni agujeros por dentro.
Un gesto medido:
susurro en el viento.
Sin previa evidencia,
se miran de frente
y con buena fortuna
de luna se impregnan.
Son dos, de repente,
que salen al ruedo
tentando al destino
que juega con ellos.

7 comentarios:

  1. La pintura de Gustav Klimt, que tiene su sede permanente en el palacio de Velvedere de Viena, preside tu entrada de hoy y tu texto,que es como siempre, maraviloso.
    Un saludo muy cordial y afectuoso

    ResponderEliminar
  2. Una poesía redonda y llena de imágenes bellas.

    ResponderEliminar
  3. Hermoso poema... Me gustó de principio a fin. Un beso.

    ResponderEliminar
  4. Me gustó sumamente. Tal vez en lugar de tentando, habria escrito desafiando. Pero no sé si habria podido escribir lo demas.
    Felicitaciones.

    ResponderEliminar
  5. me he imaginado un bosque completo, con dos esferas de luz girando por todo el lugar buscándose entre ellos, como dos coquetos angeles, duendes, hadas, almas, que buscan el consuelo de seguir el viento, mientras se observan en su vuelo....

    me ha gustado, el ritmo es bueno y la rima como en los viejos tiempos :)

    ResponderEliminar
  6. gracias Neo por tus palabras
    hoy las tuyas son pura primavera Frescas y floridas

    ResponderEliminar