Me sumo a la convocatoria juevera que esta semana Mari nos deja desde su blog. Pasar por allí para leer y comentar todos los relatos.
AJEDREZ (casi un
poema épico)
Apostados en mítico damero
alternados sobre ébano
y marfil
sobresalen el rey y su
consorte
regenteando un reino magistral.
Investidos de pompa y
circunstancia
y enmarcando con gesto
monacal
alistados, se yerguen
dos alfiles
maquinando peleas por
ganar.
Desde lejos, custodia bien plantada
con orgullo, constancia
y lealtad
en caballos, la tropa
distinguida
por el reino, dispuesta
a batallar.
Se levantan dos
torres en el llano
resguardando la hacienda
señorial,
la protegen de ataques
y peligros
ostentando templanza
y dignidad.
Y los nadie, en la
corte de peones
con incierta chance de vivir
abren paso, con arte
y osadía
infiltrados,
ofrecidos como ardid.
No resignen, vasallos,
sus vigores
la estrategia no ha de claudicar.
No hay guerra que pierda
una corona
si su pueblo se niega a sucumbir.
Hola Neo, muy bueno tu poema, como describes con cada palabra ese juego lleno de magia y misterio...Me gusta mucho la frase final, el pueblo hace la fuerza sin duda...Besos por ahí!
ResponderEliminarMe alegra que te gustará, mari. Confieso que tenía otra intencionalidad temática al comenzar, pero el texto quiso girar para ese lado a medida que escribía jeje. Un abrazo y gracias por organizar el evento
EliminarWoW, Mónica, un poema que me recordó el libro el arte de la guerra, en este caso sería la estrategia de los poderosos. El poema crea una analogía entre el ajedrez y la vida, destacando la estrategia, el sacrificio y el valor tanto de los nobles como de los humildes. Su tono épico y su lenguaje le otorgan un aire de grandeza. La representación de los peones como figuras clave, aporta una reflexión interesante sobre el poder colectivo. En conjunto, es una poema excepcional. Cuando el pueblo dice basta, no hay quien le pare. Un abrazo
ResponderEliminarUn pormenorizado análisis que valoro y agradezco de corazón, Nuria. Un fuerte abrazo
EliminarHola Mónica, me encantó tu poema, versos con muy buena rima. La verdad te felicito, a mi nunca se me hubiera ocurrido, te quedó muy bueno.
ResponderEliminarUn abrazo.
PATRICIA F.
Te agradezco y celebró que te gustará, Patricia. Un abrazo y muchas gracias por leer con atención
EliminarBravo, las figuras estarán contentas, hasta los peones tiene sus versos. El ajedrez siempre merece un elogio, tu tambien as creado un poema magnifico. Abrazucos
ResponderEliminarMe alegra que te haya gustado Ester. Muchísimas gracias por tu atención. Un fuerte abrazo
EliminarHas hecho que todas y cada una de las piezas de ajedrez se sientan orgullosas de proteger a su rey y reina.
ResponderEliminarY como tal dices, si el pueblo está contento mucho más jaja.
Versos muy sutiles si lees entre líneas. Un besote grande Neo.
Me alegra que te gustara Campirela. Te agradezco por la atenta lectura. Un abrazo
EliminarYo quitaría el casi, Neo: es un poema épico *.*
ResponderEliminarMe pareció magistral, y los últimos versos son el cierre perfecto: No hay guerra que pierda una corona / si su pueblo se niega a sucumbir.
Añadiría que ojo, ¿de qué sirve la corona si te cortan la cabeza tus propios vasallos? La corona también hay que ganársela.
Un besazo juevero
Excelente conclusión, dafne. Coincido. Celebró que te gustara. Un abrazo y muchas gracias por leer con atención
EliminarAsi es, el ajedrez es un campo de guerra, cada pieza solo sueña con "comerse" a los enemigos. Bellas coplas que indican claramente el porposito de cada pieza
ResponderEliminarAunque sea cuestionable el centro del asunto (le digo NOa la guerra siempre) se puede interpretar el juego como una clara referencia al valor de la lucha conjunta en función del bien común. Te agradezco por tu análisis. José. Un abrazo
EliminarMe ha gustado la mezcla del toque poético y marcial en tu poema! Han quedado unas rimas muy inspiradas! Je, je! Un abrazote Neo!
ResponderEliminarMuchas gracias Marifé. Me que te resultaran inspiradas jeje. Un abrazo
EliminarEs una oda a la defensa de la fortaleza, que define a la perfección el papel de cada pieza.
ResponderEliminarMe ha encantado, Neo.
Felicidades.
A veces las letras se proponen acomodarse con rimas y así fue esta vez. Me alegra que te gustara. Muchas gracias Marcos. Un abrazo
EliminarMe recordó la Ilíada, el cid..... El séptimo de línea.... dios esto fue una marcha.
ResponderEliminarJaja 😂 agradezco esa cuota de humor, Gustab. Un abrazo
EliminarInteresante lo épico del poema, como la descripción de las piezas tiene su lado de cuestión social, de como los poderosos necesitan de los que supone más débiles.
ResponderEliminarBuen aporte para el tema del ajedrez. Un abrazo
Gracias Demiurgo. Me alegra que te gustara. Un abrazo y buen fin de semana
EliminarMe ha encantado el poema que te ha inspirado, Neo, buena aportación la tuya.
ResponderEliminarUn abrazo.
Muchas gracias Maria. Celebro que te gustara. Un abrazo
ResponderEliminarHola Moni! Qué lindo es venir a leerte. Hiciste un poema que va contando historias, cada uno en su posición con su mirada, con su estrategia. Es hermoso y muy original!!! Un beso!
ResponderEliminarMás lindo es recibirte, Kari! Me alegra y espero ae repita. Un fuerte abrazo y mucas gracias por tu visita.
EliminarRealmente es un poema épido que no puede leerse sin imaginarse una batalla campal entre dos frentes..algo como imaginarse a Corazón Valiente antes de la lucha con los opresores, pero con más rango y categoría...pero con Mel Gibson como el rey...ya se me desbordó la imaginación....besossss
ResponderEliminarJaja qué bueno que tengas esa facilidad, Diva! Un abrazo y muchas gracias por tu visita
EliminarMe encantó, tiene un crescendo de épica y misterio, se ve, además.
ResponderEliminarAbrazo hasta allá.
Me alegra y se agradece. Otro abrazo
Eliminarasi es, tu frase final " si un pueblo se niega a sucumbir" es válido no sólo para el ajedrez. Buena rima lo haces tan fácil como quien se toma un cafe, Me alegro leerte Un abrazo
ResponderEliminarMe alegra que te haya gustado Rodolfo. Un abrazo y gracias por leer con atención
ResponderEliminarUn poema realmente épico. Me encanta tu forma de expresar y representar a las diferentes piezas del tablero. El final es magistral, aunque ya te lo han dicho! Bien podría ser un cántico de guerra.
ResponderEliminarFantástico! Un placer leerte, Neo.
Un abrazo!
Me alegra y te agradezco, 712. Muy amable tu comentario. Un fuerte abrazo
EliminarHola Mónica: Me has recordado muchísimo a este ajedrez medieval (data del siglo XII) que creo que tiene algunas de las piezas más divertidas y extrañas de toda la historia de este juego.
ResponderEliminarUn poema épico muy interesante.
Un abrazo.
Muchas gracias Mercedes. Celebro haberlo conseguido. Un abrazo
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