Me apunto con esta historia al reto que nos deja Mag desde su blog para este jueves. Pasar por alli para leer todos los relatos.
P.D
Gracias a tod@s quienes se ofrecieron como anfitrionar futuros encuentros jueveros.
EL ARTE DE No HACER
NADA
“Cuando empiezas a
hacer tareas de manera automatizada es entonces cuando debes tomar un descanso
o salir a caminar. Deja que la mente busque sus propios estímulos, es ahí donde
empezamos a soñar despiertos y la mente comienza a vagar, y es en ese punto
cuando hay más probabilidades de que nos llegue la creatividad” Método Niksen,
Sandi Mann
La
hoja amarilla se posó sobre su pie derecho y allí se quedó por un breve
instante, quizás como gesto de despedida antes de marcharse llevándose un
destello de sus pensamientos. La serenidad de la tarde marcaba su paso a la par
de los latidos que su corazón pulsaba sin inquietud, relajado, constante.
Detrás de una nube, una bandada de patos surcó el cielo desde el norte. La
formación en V casi perfecta se mantuvo sin alteraciones hasta que sobrevolaron
la laguna. Allí, las ansias por el agua les hizo precipitarse sin guardar orden
ni jerarquías. Uno a uno fueron descendiendo entre graznidos y aleteos
quebrando la superficie cristalina del agua en la que el sol insistía en reflejarse.
Asimilando el momento, ella observaba sus pies descalzos jugueteando con las
flores silvestres que le recordaban un tiempo lejano.
Sintió,
al fin, que había logrado aislarse de sus preocupaciones tal como prometía el
libro de autoayuda que había leído esa mañana, justo después que todo el drama
se desencadenara. Allí tendida sobre la hierba fresca la vida lograba verse
desde otra perspectiva y los problemas que antes llegaban a ahogarla, ahora
parecían más ligeros y fáciles de enfrentar. Se felicitó por haberse permitido
esa pausa que volvió a ponerla en equilibrio frente a la aparente irresolución
de las cosas. Llenando sus pulmones con el aire diáfano que la envolvía,
renovada en sus fuerzas, sintió que era hora de regresar.
Con
una leve sonrisa en sus labios y la mente despejada supo exactamente como
resolver el conflicto postergado que tanto la venia torturando y del que, pese
a sus esfuerzos cotidianos, no había logrado escapar.
Esa noche, como quien se olvida de hacer lo que
automáticamente realiza todo el tiempo, luego del acostumbrado zoom con su
hermana, dejó la cámara encendida de su computadora y comenzó a grabar desde el
momento justo en el que el maltratador de su marido regresó para cenar.
Al día
siguiente había reunido material suficiente como denunciarlo por desfalco y
malos tratos -todo junto- sin que ningún abogado pudiese refutar las pruebas
que -casi sin hacer nada- había podido recabar.
Dos pajaros de un tiro...ese día logró escapar de sus preocupaciones vagando por el campo y dejandose absorber por las maravillas de la naturaleza y...escapar de ese hombre que la maltrataba..bien por ella!!...ojalá siga disfrutando el placer de no hacer nada....bsss
ResponderEliminarSeguro que a partir de ese momento se sintió mucho más libre jajaja. Un abrazo y muchas gracias por leer, Diva
EliminarMe encantan los libros de autoayuda, casualmente acabo de leer uno, a mí me encantan, es una manera de relajarse también.
ResponderEliminarUn placer leerte, Neo.
Besos.
Tal vez algunos sirvan, en general, yo descreo María, pero bueno, cada uno interpreta según su experiencia. Un abrazo y muchas gracias por pasar y leer, María
EliminarMe encantó tu relato, como lo llevaste desde el principio, ese momento de relax observando la naturaleza y el sorprendente final, donde ella supo cómo poner cada cosa en su lugar.
ResponderEliminarMuy buena historia, un abrazo Mónica.
PATRICIA F.
Me alegra y te agradezco, Patricia. Me gusta dar un giro que sorprenda jeje. Un abrazo y muchas gracias por leer con atención
EliminarUn gran momento para definir en la soledad y el no hacer nada
ResponderEliminarCon la cabeza fría se definen mejor los problemas. Gracias Rodrigo.
EliminarUn final tan sorprendente que me ha dejado con la boca abierta, además sirve para demostrar que tomarse momentos para tener la mente en blanco, da buenos resultados a la hora de tomar decisiones precisas y rápidas.
ResponderEliminarUn abrazo
Me alegra haber creado un desenlace inesperado Tracy. Muchas gracias por tu visita
EliminarMuy bueno tu relato Neo, el momento de los pies descansos y ese momento final sorpresivo... Siempre viene bien hacer una pausa y no hacer nada... Besos por ahí!!!
ResponderEliminarMe alegra que te gustara Mari. gracias por tu atención. Un abrazo
EliminarPuede ser necesario tomarse un descanso para evitar que las circuntancias aplasten.
ResponderEliminarEn este caso, la protagonista obtuvo la lucidez para afrontar su problema, muy serio.
Un abrazo.
A veces medio de la crisis, no vemos la salida, pero si nos permitimos ampliar nuestra óptica, puede que logremos resolver el problema sin esfuerzo. Un abrazo, Demi. Muchas gracias por leer con atención
EliminarEse no hacer nada, dejar fluir, ser al cien por cien, le permitió ser ella misma, con la grabación que ayudó a denunciar al tiparraco.
ResponderEliminarMe ha encantado el rimo que le diste. Un abrazo enorme
Agradezco tu generoso comentario, Albada. Me alegra reencontrarte. Un abrazo
EliminarEl 'no hacer nada' y relajar la mente le hizo ver claro y decidir. Buena aportación Moni. Un abrazo!
ResponderEliminarTe agradezco, lady. Muchas gracias por tu visita. Un abrazo
EliminarSin duda deberíamos regalarnos más a menudo esos momentos de paz! Son totalmente necesarios para que nuestra mente recargue pilas y podamos pensar mejor! Como la protagonista del relato, que dio con la solución a su problema! Un abrazote Neo!
ResponderEliminarCoincido, Marifé. Solemos caer en la trampa de las prisas y no actuamos con la claridad que se necesita. Un abrazo y gracias por leer
EliminarHacer sí que hizo y algo gordo, aunque físicamente no fuera costoso. Aunque eso sí, una acción negativa, un " no hacer", no apagar la cámara.
ResponderEliminarVaya giro nos has dado al final, pensaba que me había cambiado de relato sin darme cuenta.
Besoss
Jaja esa fue mi intención, meterte en la contemplación sin saber cuál era el quid del asunto. Un abrazo y muchas gracias por tu visita, Gabi
EliminarTu historia prueba que la reflexión serena que se consigue por ejemplo con la sana contemplación de un paisaje o una bandada de pájaros evolucionando sobre las aguas puede resultar una ayuda extraordinaria para resolver problemas, como en este caso con el maltratador que le había tocado en desgracia. Qué bien has trazado el recorrido hasta ese final tan dichoso para el lector ávido de justicia.
ResponderEliminarEnhorabuena, Neo.
Me alegra haberlo conseguido, Marcos. Muchas gracias por la atenta lectura. Un abrazo
EliminarGol de Españaaa
ResponderEliminarSiii jaja. Felicitaciones!!!😁
EliminarPerdon es la final Respecto a tu entrada nos has ido paso a paso relajando el alma con bucólica narraciones hasta que la tormenta nos sorprende y la
ResponderEliminaresperanza nos redime Un abrazo
Jaja muy entendible el lapsus, Rodolfo! Gracias dobles por leer mientras veías el partido! Un abrazo grande
EliminarUn relato que en principio nos despista para darnos el sablazo final, que por suerte la protagonista logró desquitarse del maltratador. Una lacra que ojalá desaparezca pronto. Muy bueno Mónica. Un abrazo
ResponderEliminarAsí lo venimos luchando, Nuria. Un abrazo y muchas gracias por leer
EliminarTomándose un tiempo "sin hacer nada" lejos de la influencia de él, es cuando su mente encuentra la solución. Muy bueno.
ResponderEliminarM. Cristina
Me alegra que te parezca interesante. Muchas gracias M. Cristina. Un abrazo y gracias por tu visita
EliminarTan impecable tu prosa, me evoca el libro de cartas de Raymond Chandler desde la Jolla (donde vacacionaba junto a tu gata Taki) en las que varais veces postula justamente eso, sobre el ocio como arte capaz de abrirles la jaula al vuelo de la imaginación y la sabia creatividad-...
ResponderEliminarAbrazo hasta allá.
No conozco el texto que nombras, Carlos, pero me haces querer averiguar mas sobre el mismo. Un abrazo y muchas gracias por leer
EliminarHola:
ResponderEliminarMe alegro de que tenga pruebas para denunciarle, aunque técnicamente no estuvo "sin hacer nada"...Estuvo descansando que fue lo que la permitió ver las cosas desde otra perspectiva. 🤔
Un abrazo. 🤗
Es que no hacer nada es muy difícil, si nos ponemos a pensar con rigor. No hacer nada se logra solamente al morir. Gracias por leer y comentar Mercedes. Bien fin de semana
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