Aporto a la convocatoria juevera de esta semana con una particular interpretación del tema, esperando que no resulte totalmente ajena a la consigna. Para leer más textos participantes, pasar por la Trastienda de Mag.
P.D
Recuerden que quienes quieran sumarse (con su foto de infancia) a la tarjeta navideña, pueden hacerlo hasta el 30
EL RINCÓN DE LA CULPA
Agazapada en las
sombras
mordiéndome los
labios
te aguardo ansiosa
en mi rincón
preferido.
Aquí, donde tú
guardas
los triunfos y las glorias
junto a tus finos
encajes
y la impagable fortuna
de conseguir olvidar,
aquí, donde en
silencio
te ocultas y te
quitas
las penas y las
prendas
después de un baño
calmo,
aquí -cuando más
duela-
emergeré de pronto
trayendo del olvido
el rostro de quien
fuera
tu primer gran
estorbo
en ésta, tu loca
carrera
por alcanzar las
estrellas
a fuerza de doblegar.
Un sitio adecuando, en la intimidad, donde afloran las cosas verdaderas. Un abrazo.
ResponderEliminarY la culpa lo es, brota de la conciencia, qué más íntimo que ella! Gracias por leer. Un abrazo
EliminarMe ha gustado mucho dar un paseo por tu corazón...en tu rincón favorito
ResponderEliminarUn beso
No soy "la culpa" pero espero haberla podido personalizar sin malentendidos
EliminarElla coexiste y aguarda serena; segura y altiva; siempre dispuesta a ejercer su influencia. Ese rincón intrínseco; a veces, demoledor… otras, bálsamo y calma…
ResponderEliminarQué bien lo has resuelto, Mónica.
Una muy buena perspectiva de ese lugar innato en nuestra esencia.
Me ha gustado mucho.
Siempre un placer leerte.
Abrazo grande, y feliz tarde 💙
Te agradezco por leer con atención, Ginebra. Muchas gracias. Un abrazo
EliminarOdio ese rincón, lejos de ser mi favorito, pero un rincón que todos tenemos y que no podemos espantar.
ResponderEliminarCoincido. Gracias por leer con atención, Gustab. Un abrazo
EliminarNos has mostrado un rincón muy particular, donde a veces hay culpa, otras alegrías,pero siempre eres tú quien guarda ese rincón con alevosía. Un perfecto poema y entre lineas tu esencia.
ResponderEliminarUn fuerte abrazo.
Intenté ponerme en el lado de la culpa, que surge en la conciencia de alguien muy trepadora y dañina. Tal vez no logré expresarme bien. Un abrazo
EliminarAl principio pensaba en el rincón de pensar de la infancia, pero hay rincones también dolorosos cuando crecemos. Besos.
ResponderEliminarDolorosos y vergonzosos. Gracias por leer, Inma. Un abrazo
EliminarQue la culpa se quede entonces en el rincón, que resguarde los encajes, las penumbras y todo lo demás. Que no se aleje demasiado de ese rincón. Que la vida ya es algo ingrata como para decorarla con la culpa.
ResponderEliminarHermoso texto!
Te dejo besos!
Muchas gracias Ettiene por tu visita y comentario. Un abrazo
ResponderEliminarEl rincón de pensar puesto a examen, nos resuelve las tribulaciones o nos imbuye en nuestro pensamiento, un rincón para aparcar la culpa ese juicio moral que recae sobre alguien. Unos abrazos
ResponderEliminarY uno no escapa nunca de ese juicio. Gracias por leer con atención, Ester. Un abrazo
EliminarEs curioso este rincón, porque siento el elegido, dice mucho de la persona que siente esa culpa.
ResponderEliminarBesitos.
La culpa es implacable, cuando menos lo esperamos, surge de la conciencia sucia pese a los intentos del orgullo por borrarlo todo. Gracias por leer, Noelia. Un abrazo
EliminarMuy intensa tu poesía y el mensaje! La culpa que, a quien más quien menos, nos ha perseguido alguna vez! Rincón incómodo en el que estar! Un abrazo!
ResponderEliminarAsí quise plantearlo Marife. Me alegra que lo interpretarlas desde ese ángulo. Un abrazo y muchas gracias por leer con atención
EliminarUn rincón que para algunos es de culpa y para otros de placer según el momento, pero siempre reconfortante
ResponderEliminarCuando la conciencia pica, la culpa surge en algún momento y no es fácil convivir con ella y enfrentarla. Un abrazo y gracias por leer Tracy
EliminarEn la intimidad todo se cuece.
ResponderEliminarLo que importa es poder estar con uno mismo y meditar.
Muy delicados, emotivos y tiernos tus versos.
Besos, Mónica
Me alegra que te gustaran Myriam, muchas gracias. Un abrazo
Eliminarese rincón está en nosotros, que cuando tenemos la necesidad de encontrarnos si andamos perdidos, recurrimos a ese espacio que nos ayuda en la búsqueda. Un abrazo
ResponderEliminarA veces la culpa llega cuando nos creemos a salvo de su censura, cuando pensamos que lo que hicimos ya ha pasado a la historia sin ser juzgados. Un abrazo Rodolfo, que tengas un buen fin de semana
EliminarEl rincón de la culpa... Es interesante que ese rincón se haya convertido en su favorito, quizás porque se encontró a sí misma ahí.
ResponderEliminarUn besazo, Neo
Es el favorito de la culpa, es donde la encuentran vulnerable. Besos
EliminarUn rincón que da qué pensar y quizá perdonar hasta conocerse a sí misma.
ResponderEliminarSaludos
Conocerse y perdonarse. Gracias por leer, musa. Abrazo
EliminarNo sé por qué la capa debe quedarse en un rincón. Tal vez deba volar alto para pesar menos.
ResponderEliminarHas hecho una versión muy Interesante de un rincón que todos visitamos en algún momento.
Mil gracias por tu participación, Moni.
Estoy mirando lo de la tarjeta.
Un beso enorme 😘
Fue un placer, MAG. Gracias por la propuesta. Apúrate con lo de la foto🤪
EliminarLa niña de la foto no sé qué ha hecho, pero algo ha hecho.
ResponderEliminarLa culpa ya debe rondar cerca. La culpa no tiene rincón, surge de pronto en cualquier situación que te haga recordar slgo.
La chica de la foto en un par de años no cabrá en el rincón.
Abrazoo .moni. te mando la foto en breve
Te agradezco por leer con atención, Gabiliante. Un abrazo y apúrate con la foto!
EliminarHola, Erik:
ResponderEliminarYa ves compañero “despistado”, pese a sus malos augurios seguimos en la pista bailando lo que nos gusta y no cuando nos toca.
Un abrazo, Erik.
Veo que te has confundido de destinatario, Nino. No soy Erik!
EliminarVeo culpa en las palabras y en esa mirada, pero también miedo... ¿pueden ir juntas esas dos cosas?
ResponderEliminarQuizás esa niña represente tu culpa, una niña asustada...
Si hay culpa, sin dudas también hay miedo, miedo a ser castigado o a ser rechazado. Vaya uno a saber! gracias por ller Beauseant. Un abrazo
ResponderEliminarA mi me ha emocionado tu relato, es muy sentido.
ResponderEliminarHay rincones donde nos escondemos del mundo.
La culpa tantas veces la hemos llevado a cargas sin tenerla, ni merecerla.
Donde en silencio te ocultas...y asi lo calllamos hacia dentro.
Tienes mucha sensibilidad y así nos lo haces sentir.
Un abrazo y la imagen es una maravilla también.
Me alegra que así lo hayas sentido. Te lo agradezco. La imagen no es mérito mío. Un abrazo, Cora y muchas gracias
EliminarUn rincón de inseguridad y miedo, un rincón de incertidumbre y desasosiego, lugar en el que aunque queramos ocultarnos jamás seremos capaces de alejarnos de nosotros mismos.
ResponderEliminarMe encantó leerte... siempre es un placer hacerlo.
Un abrazo.
Te lo agradezco de corazón, Jorge. Un abrazo
EliminarPoco a poco se fortalece, hasta que hace acto de presencia, a veces demoledora.
ResponderEliminarUn abrazo
" A veces, demoledora" tal cual. Gracias por leer, mujer de negro. Un abrazo
EliminarNo lo he entendido a la primera pero me ha gustado desde la primera; es precioso el poema aunque ese lugar sea, la culpa.
ResponderEliminarBesos, Neo, que tengas una linda semana.
Gracias dobles por intentarlo. Me alegra que te gustara. Un abrazo
EliminarCon retraso te leo. Una poesía que se me antoja llena de tristeza. Regresemos a la alegría.
ResponderEliminarUn abrazo querida Neo.
Que así sea, Berta. Un abrazo y muchas gracias por leer
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