CADA JUEVES UN RELATO: VUELO SIMBÓLICO - Mi aporte

Sumándome a mi propia convocatoria e inspirándome en varias de las estupendas imágenes de Denis Sarazhin:

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VUELO SIMBÓLICO

No. No quiero seguir aquí. Quiero despertar. Prisionera mi mente en este infierno que no cesa, busco la salida para liberarme. Apretando mis sienes me esfuerzo por encontrar la brecha por donde escurrirme, más allá del tormento que significan los malos recuerdos.

Buceando aquí, en medio de este mar de culpas e inseguridades, pujo por escapar, luchando en medio de otros que tampoco hallan su camino. Me siento aterrorizado mientras intento avanzar, sin éxito, en medio de un mundo turbio e inconsistente que no me cobija ni contiene. Sólo me angustia y confunde entre sus penumbras.

¡Al fin algo de luz! Tenues rosas que iluminan el claro que te envuelve elevándote sobre el abismo que me habita. Logras sembrar tu paz irradiando la calma que no tengo y que clamo por conocer. Suspendida en un limbo que me embelesa logras volar más allá de las conciencias sin necesidad de mirar o de moverte. Sólo contemplas en silencio tu interior y eso basta para transportarte hacia una dimensión que no comprendo y que cada vez te vuelve más diáfana.

Anclado al suelo fétido quedo clamando al cielo por tu presencia que ya se ha ido. Extiendo hacia lo alto mis brazos impotentes en un gesto vano por retenerte. Ni fuerzas tengo para decir palabras. Otra vez me envuelve la oscuridad en la que me has dejado abandonado e intento al menos conservar un destello de tu luz en mi recuerdo.

Como un punto breve de algo que no fue, logro preservar una brizna que de ti he logrado arrebatarle a las tinieblas del olvido. Aquí la veo sobre la yema de mi dedo, como un tesoro. Como una criatura angelical que se deshace si la sostienen sin delicadeza. Leve y sutil, se deja contemplar en generoso gesto y con mágica persistencia, crece en intensidad y fuerza, abriéndose paso entre el tormento que me aqueja. Su luminosidad me da consuelo y guía mis pasos confusos. Siembra en mi interior algo que alguna vez llamé esperanza.

Tal  vez ésta sea la única manera que hallaste para rescatarme de tanta locura.