Esta semana es Ceci quien lleva la batuta juevera y nos propone escribir sobre ritos y agasajos culinarios. Mi aporte no lleva implícita una receta para compartir, pero, bueno, cada quien podrá interpretarla a su manera.
=)
Para leer todos los textos, pasar por su blog.
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RITOS CULINARIOS
Más allá de la singular alquimia de
los sabores jugosos y en el innegable arte en el manejo de las especias y los
aceites, la experiencia de paladear uno de sus irrepetibles platos, dotaba al
privilegiado comensal de inesperadas alas para explorar lugares inusitados de
su propia alma. Y es que sentarse frente a su mesa para participar de alguno de
aquellos singulares encuentros, significaba ser partícipe de un cuidadoso rito,
una exquisita ceremonia culinaria que comenzaba apenas traspasar la puerta
dejándose acariciar por la cadencia de las cálidas luces y las perfumadas
flores cuidadosamente ubicadas para la ocasión.
El primoroso mantel, la vajilla
armoniosamente dispuesta, toda la decoración acorde al cariz que la experimentada
anfitriona interpretara más adecuado para el especial juego de sabores que se
prestaba a ofrecer.
La elección del vino, por
supuesto, no era un detalle dejado al azar: se meditaba con bastante antelación
la conveniencia del maridaje adecuado para cada plato, incluso, para los
postres.
Todos los detalles puntillosamente estudiados, buscando incentivar al
máximo la placentera experiencia de la degustación gastronómica, una singular
experiencia gourmet que el afortunado convidado podría compartir por única vez.
Tan extraordinaria e irrepetible como para llevarla muy presente
por el resto de su vida… una vida muy breve, por cierto. Apenas lo suficiente
como para que la virtuosa chef hallara otro convidado adecuado a quien a
agasajar con un próximo banquete.
Y el placer por degustar tan exquisito menú que acaricia su alma quizás es suficiente para su corta vida.
ResponderEliminarEs encantadora la forma en la que escribes, Neo
Besos
No creo q la chef les pregunte abtes de convertirlos en su próxima comida, jeje, pero quuen sabe! Todo puede ser :-) muchas gracias por pasar y leer Ame. Un abrazo
EliminarComo dicen "Lo bailado nadie se lo quita" , ni al siguiente cuando lo deguste :)
ResponderEliminarUn placer Neo
Jeje, muy adecuado el refrán, gracias otra vez :-)
EliminarY sin dejarles pedir un último deseo antes de su última cena. menuda cadena de alimentación tenia montada. Abrazucos
ResponderEliminarJeje, em la cocina ponia el alma, eso si! :-) gracias Ester. Un beso
Eliminarwuaw! que final! una viuda negra de la alta gastronomía! eso sería morir en la ley de ella
ResponderEliminarGrandioso ambiente y detalles, dignos de un crímen sofisticado y de delantal blanco
Buenísima participación, le aporta un toque de tragedia a la convocatoria...
Gracias por tu participación Mónica, te dejo un beso grande y buenfinde
Jeje, últimamente mis aportes vienen bastante macabros Ceci... pero juro que soy buenita! :-) beso grande y muchas graciad x tu amable comentario
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ResponderEliminarEsto no lo iguala ni el mismísimo Hichkoch, "El mago del suspense", muy bueno, sí señora. Enhorabuena.
Un abrazo.
Muchísimas gracias Mari Carmen, me honra tu comentario. Un abrazo
EliminarMe ha encantado. Esa preparación y puesta en escena perfecta, para degustar la última cena. Un sistema de asesinato que no deja de tener su amor hacia alq ue uno pretende matar :-)
ResponderEliminarUn abrazo y feliz día
Me alegra que te haya parecido bueno. En realudad, cuando comencé a escribirlo, no tenia claro hacia dónde iría, jeje. Muchas gracias Albada. Un abrazo
EliminarMe quedé con la gana de saber que iba a comer él, porque lo que iba a comer ella está claro :)
ResponderEliminar¡ay, pobre incauto que no sabía la que se le venía encima! Me ha gustado como describes el escenario, cuidando todos los detalles.
Bss, Mónica.
Jeje, se supone que la gourmet convida con su anterior invitado, una cadena de agasajo y adquisición de ingredientes para la proxima cena a la vez, jaja. Un abrazo Mar, muchas gracias por tus palabras. Un abrazo
EliminarUna entrada donde la elegancia se aprecia en la primera frase ..es cierto que no solo se come por la boca , creo que primero empezamos por la vista ..la decoración de una buena mesa y lo bien que este puesta llama mucho la atención al comensal y el olor otro complemento indispensable ..
ResponderEliminarUn feliz jueves y fuerte abrazo Neo..
Se agradece el comentario, Campi, un abrazo
Eliminarjajajajajaja muy bueno, una viuda negra caníbal.
ResponderEliminarPobres inocentes convidados. NO, si a veces,
las apariencias engañan.
Muy buen relato con el punto justo de suspenso.
Besos, Mónica
Tal cual lo definiste, Myriam! Viuda negea caníbal, sólo que no come a su invitado en la primer ocasión, sino en la segunda... jaja muchas gracias por pasar y leer. Un abrazo
EliminarVaya rotundo y macabro final. !Te felicito, me a super encantado!
ResponderEliminarY tu sabes que me embruja todo lo que tenga que ver con escalofriantes situaciones. Una chef de este calibre no se encuentra fácilmente. Genial!
Abrazo
Jejeje, me alegra, Yessy, que te haya gustado. Muchas gracias por pasar y leer. Un abrazo
EliminarOh, me encantan estos giros finales. El inicio del relato me hizo desear ser una invitada de esta anfitriona. En especial la elección de unos buenos vinos se me hace interesante.
ResponderEliminarPero si me imagino el final de los desdichados que se sientan a su mesa, mejor paso.
Genial historia.
Un abrazo.
Muchísimas gracias por tu visita y comentario Cyn. Me alegra que haya logrado sorprenderte en el final. Un abrazo
ResponderEliminarMira que es un buen final, una cena exquisita para despedir los placeres de este mundo...
ResponderEliminarHoy por hoy no, pero tal vez dentro de unos cuantos años, si mi estado de salud lo recomienda, me presente voluntario a una cena de esas características.
Entre tanto nos vamos leyendo, querida amiga. Un abrazo.
Jeje, nooo Juan Carlos! Cenar gourmet es una cosa, ser la cena misma, nunca! Jaja, muchas gracias por pasar y comentar con buena chispa, un fuerte abrazo
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