Esta semana, nos conduce Matices
Con la profunda expresión de abarcar
el universo con el filo de su
mirada,
se destaca entre la multitud
que sin prestarle atención,
como parte del paisaje lo traspasa.
Sentado en una banca, en soledad,
apoyadas sus manos sobre el bastón
-sobre el que antes se sostenía al
andar-
agudiza cada uno de sus sentidos
concentrándose en escudriñar
con fluida precisión, la trama
de cada uno de los que pasan.
No es óbice para esa misión
ni la breve impresión
ni la ausencia del sol
ni la poca visión
que sus viejas pupilas
bajo sus gafas captan.
Para lo que es esencial
solo le basta observar
con serena virtud
y los ojos del alma.
Como captas la atención del lector. Bien escrito.
ResponderEliminarEs precioso y los versos finales son pura melodía, y dicen algo muy cierto, la mirada del alma capta lo esencial...
ResponderEliminarMuchos besos
Hasta el final con la mirada en tus versos para constatar que no hay mirada mas cierta que la del alma. Saltibrincos
ResponderEliminarBuenas tardes, Mónica:
ResponderEliminarMuy acertada la reflexión que creo encontrar en tu poema, ya que con el paso del tiempo he vuelto a mirar con los ojos del alma, como cuando era un niño-
Un abrazo, Mónica.
Una hermosura en forma y ritmo. Su contenido me enterneció, la sabiduría de los mayores y esa mirada que dan con el alma.
ResponderEliminarTe felicito Moni, una joya.
Besitos.
Son unos versos que calan porque cuentan una historia que entran en lo más profundo del alma.
ResponderEliminarMe encantó.
Un abrazo
Una descripción con mirada muy poética sobre la otra mirada.
ResponderEliminarBellísimo.
Besos
Bello y escueto.
ResponderEliminarUn beso.
Toda la sabiduría cabe en este renglón:
ResponderEliminar"abarcar el universo con el filo de su mirada"
Tanta ternura, tantos caminos recorridos viven en los ojos de un anciano...
Un beso
Mónica,
ResponderEliminarsin duda la mirada del alma, en serenidad, capta lo esencial y en milagrosos instantes,abarca el universo... fundiéndose con él.
Gracias por estar ahí, con tu mirada, la que cada año hace esos collage preciosos para Navidad :)
Un abrazo linda.
Están los que miran sin ver, y están los que ven desde la sensibilidad que la vida les fue otorgando.
ResponderEliminarTu poema pone al lector frente a la imagen de un hombre que a sus años aún puede descubrir que hay maneras más intensas de ver, aunque no siempre de ser visto.
Un gran poema que invita a no perder la mirada a lo que esencialmente importa.
Besos!
Gaby*
Mirar con los ojos del alma, eso sí que es mirar y ver todo lo que hay más allá de lo puramente artificial.
ResponderEliminarBello Neo.
Besos.
Con los ojos del alma. Ese matiz es el que marca una nítida frontera entre el hecho de mirar y el hecho de ver. ¡Tantas veces miramos sin ver!.
ResponderEliminarUn fuerte abrazo.
Que poco observamos a nuestros mayores, creo que hay que hacerse mayor para volver a mirar con los ojos del alma, un precioso poema, me encanta la velocidad que imprimes a la segunda estrofa con la repetición y el verso corto para ir frenando como la caída de una pluma con palabras como serenidad y dejar la idea principal como almohada, “los ojos del alma”, lo sé, lo sé, se me nota a legua que soy una incondicional de los poemas, pero es que es tan bonitooooo, aisssss, miles de besossssssssssssssss.
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