El siguiente texto fue escrito en colaboración con Juan Carlos, quien tuvo la excelente idea de asociar el tema que hoy nos convoca con nuestro grupo juevero.
Aquel jueves iba a ser muy especial.
Tras años escribiendo en su blog sobre la misma propuesta que decenas de
compañeros, el próximo la lectura se haría en persona.
Una editorial de Florida había promovido el encuentro e invitado a todos y
cada uno de los participantes.
Nada más bajar del avión, aún en aquella espantosa terminal del aeropuerto,
la televisión emitía una entrevista en la que Vivian, Alfredo y María José
explicaban la historia del movimiento juevero.
Entonces comprendió la magnitud del acontecimiento.
Tuvo conciencia que aquello que alguna vez empezó siendo
casi un juego, una manera ingeniosa de efectivizar lazos a distancia a través
de palabras más libres que el viento, hallaba en esos momentos su cúspide y
efectivamente ella estaba allí, ahora, sobre esa misma cúspide, junto a tantos
otros compañeros a quienes por fin abrazaría en persona.
Podría al fin prescindir del vínculo virtual que hasta ahora
había servido para mantenerlos unidos y comunicados. Los de un lado del charco y los
del otro, ahora sí, todos al fin reunidos podrían estrechar los lazos nacidos
en la red y fundirse en un sólido grupo de amigos reales, mancomunados a través
de las palabras compartidas.
Describir la emoción, la sincera alegría, los nervios que
sentía antes del encuentro le resultaba muy difícil de explicar. Por suerte no
era ella quien tenía un micrófono frente a su boca para contarle al público
todo aquello.
Seguramente no hubiese sido tan explícita como veía que, afortunadamente sí lo eran los tres jueveros entrevistados…y sonriendo, mientras buscaba un taxi que la condujera a su hotel, las voces e imágenes de sus amigos replicaban en su cabeza augurando el extraordinario encuentro que estaba a punto de producirse en aquella gran ciudad.
Seguramente no hubiese sido tan explícita como veía que, afortunadamente sí lo eran los tres jueveros entrevistados…y sonriendo, mientras buscaba un taxi que la condujera a su hotel, las voces e imágenes de sus amigos replicaban en su cabeza augurando el extraordinario encuentro que estaba a punto de producirse en aquella gran ciudad.
Más relatos, en lo de Alfredo.
Sería magnífico un encuentro a este nivel. Yo conocí otro menos importante pero muy enriquecedor.
ResponderEliminarfue creo un dia especial para todos, Y aún los lazos afectivos y de amistad perduran en la mayoria de las casos.
Saludos sencillamente amigables
Besazos cómplices a mi querida catalanita.
Eliminarmenos mal que he comenzado a esconderme, que si no, ya te diría yo a ti...desde luego, en estando yo en ese aeropuerto, de seguro que preparo un escándalo si te veo en los alrededores...de eso estoy seguro. sería de tal magnitud dicho escándalo, que hubieras debido de ponerte delante de los micrófonos. eso sí, yo, en ese instante, hubiera desaparecido dejándote el protagonismo...jaajaj
ResponderEliminarmedio beso, mónica.
Yo veo el movimiento juevero igual de grande que el de tu presentación.
ResponderEliminarUn beso.
Querida amiga: he hecho mis esfuerzos para unir ambas margenes del charco. He ido hasta Punta del Este para abrazarte y he perdido el miedo al avión para conocer gente increíble. Sueño con ese encuentro multitudinario que nos permita el disfrute de ir de excursión como en aquel bus de los sábados. Te acordás?
ResponderEliminarTodo es posible. Cuesta, pero si se quiere, yo creo que puede ser.
TU RELATO ME EMOCIONA, ya ves, me desboqué....
besos y te lo doy la bienvenida, se que un día pisaremos un mismo aeropuerto!!!
Entrelazar, en texto y en la vida...
ResponderEliminarBesos.
Interesante muestra de colaboración. Me gustó el resultado. Y sí es una forma de amistad.
ResponderEliminarAunque podría mencionar cierta polemica...
Es un texto lleno de alegrías, y emociones compartidas. Imagino lo impresionante que son esos encuentros, y como olvidarlos? Si esa emotividad queda impregnada para siempre en el alma. Me encanto leerte.
ResponderEliminarSaludos
La relación virtual crea amistad, si bien no es como aquella que mantenemos con los compis del cole o los de hace mil años,si que crea lazos suficientes como para embarcarse en un viaje para dar y recibir un abrazo.
ResponderEliminarGracias, Mónica, por continuar esta idea. En particular le has dado esa emoción del participante, que hace sentir el relato.
ResponderEliminarBesos.
Genial artistas de letras imágenes y corazón, que lo sois,. Besos
ResponderEliminarPrecioso amiga, ojalá sea posible ese encuentro, mientras tanto nos tendremos que conformar con la amistad virtual.
ResponderEliminarUn abrazo
Siempre digo que tengo el sueño de poder abrazarlos a todos algún día, ya pude hacerlo con algunos y lo que se siente es mágico, no pierdo la esperanza de que se haga realidad. Tu relato me incentiva a que puede suceder, un beso enorme.
ResponderEliminarMe encantaría poder hacer realidad ese encuentro físico con tantos amigos de ese lado del mapa. Sería algo fantástico dar y recibir abrazos de amigos tan queridos.
ResponderEliminarMe ha gustado vuestro ejercicio conjunto sobre la amistad.
Un fuerte abrazo.
Creo que has puesto la miel en los labios de todos los jueveros, ¡menuda has liado!
ResponderEliminarCreo que has puesto la miel en los labios de todos los jueveros, ¡menuda has liado!
ResponderEliminarCreo que has dado en el clavo, lo que todo juevero sueña, un encuentro multitudinario de jueveros de ambos lados del charco. Sería genial.
ResponderEliminarUn abrazo grande
El movimiento juevero es muy grande, habéis aunado fuerzas y arte, y lo que es más grande aún, habéis enlazado corazones. Enhorabuena Neo.
ResponderEliminarSolo se me ocurre decirte !OJALÁ, OJALÇA, OJALA...! Seria una experiencia inolvidable, me ocurre como a Casss, me emociona solo pensarlo.
ResponderEliminarBesos.
Genial, sueño, uno nunca sabe lo que puede ocurrir y porque no sería maravilloso besos Monica --- NEO :)
ResponderEliminarMónica y Juan Carlos, me habéis puesto la piel de gallina ante la posibilidad de que ese sueño se realizase.
ResponderEliminarYa nos imaginaba juntos tocándonos para confirmar nuestra existencia.
¿Cómo dices que se llama esa Editorial de Florida...? Ya le estoy mandando el curriculum del grupo, para ver si cuela.
Besos y gracias por hacernos soñar.
Me parece buena la idea de escribir entre dos. Y lo un encuentro entre ambos continentes sería genial!
ResponderEliminarUn abrazo
Que esperen un par de días y estoy lista para el viaje... Qué maravilloso sería ese encuentro!!!
ResponderEliminarBravo a los dos, AMIGOS.
¿Y si esto fuera una premonición? Sólo de pensarlo me recorre un escalofrío por la espalda. ¡Nos vemos en Florida!
ResponderEliminarUn beso
Me has provocado una enorme sonrisa al imaginar la escena y me emociona saber ese sentimiento que tienes de desvirtualizarnos, es decir de pasar de la amistad virtual a la real. Yo recientemente lo he hecho en la presentación de mi libro y es tal como lo expresas. Querida amiga ojalá algún día se cumpla.. Un beso
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ResponderEliminarAunque no participo en los jueves, lo hago en palabras de -Sindel, no me ha sido dificil imaginar cuanto y como describes ese encuentro, ¡bravo¡, la imaginación es tan agradecida que disfrute mucho.
Besos fuertes
tRamos
Que lindo Monica! has elegido bien a los tres locuaces!!
ResponderEliminarQue emocionante sería verdad?!, deberiamos repetir los de por acá, que les parece??
Besote