(inspirada en la música, esta entrada es sólo una escusa para subir el tema de Piazzolla!)
De entre las sombras
que entreteje el destino
vienen sueños
que destruyen silencios
susurrando al oído.
Persistiendo en nombrar
lo que estaba dormido
vienen vientos
con murmullos intensos
rescatando al olvido.
Me ha gustado la metáfora de los sueños de las sombras y que rescatan el olvido y por supuesto Piazzola.
ResponderEliminarAbrazo
¡Qué curioso!, iba a escribir lo mismo, lo mismo que ha escrito Jaal.
ResponderEliminarEs bello, me parece que ando rescatando demasiados olvidos últimamente. Bss.
ResponderEliminarEs un poema precioso.
ResponderEliminarLa fotografía también es impactante.
Un abrazo.
Hay veces que en cerebro, en ese rincón de los recuerdos dormidos, aparece un flash, nocturno o diurno, que se convierte en vendaval de remordimientos, de dulzura, de angustia, de celos, de envidia, de amor, de frustración, de belleza, de ternura, de alivio...
ResponderEliminarUn beso y cafelito.
Con el título creía que ibas a hablar de los jarabes para la tos :))
Pero me gusta esta entrada que fue un pretexto.
ResponderEliminarPiazzolla es la excusa para llegarnos con su ritmo a esos rincones íntimos que tú expresas entre el olvido, la ceniza, y el rescate, la ceniza entre los dedos, palpable.
ResponderEliminarBesitos.
Uffff, una entrada brutal.
ResponderEliminarhay que verla en dOs partes, primero leer tu poesía y después cerrar los ojos y oír OBLIVION
Maravillosa conjunción Neo. Y yo aquí rescatando.
ResponderEliminarUn abrazo.
Bello. Un beso
ResponderEliminarPorque las cosas ( y las personas), no mueren, se trasladas a otro espacio y vuelven cuando les parece.
ResponderEliminarExcelente la foto!
ResponderEliminarEs en Colonia? El Buen suspiro?
Muy acorde con la mússica y el poema.
Un abrazo. Buen finde!
Que sean bellos sueños, en todo caso...
ResponderEliminarAbrazos, Mónica!
No hacen falta excusas para la belleza, sea en forma de foto, de música o de poemas. Precioso.
ResponderEliminarBesicos.