Serpenteando
siguiendo el Adige
con encanto,
se parte Verona.
En sortilegio
de aguas y puentes
sobreviven en pie
las memorias
bien reales
o en sueños creadas
de romances
y eternos amores.
Caminando
sus calles pobladas
la elegancia
se hace colores
bajo el sol que se abre
al invierno
en sus plazas
se palpa la historia.
¡Verona!
ResponderEliminarQuiero viajar a Verona y enamorarme.
No conozco Verona aún. Y digo aún porque en algún momento se que iré. Estupendas fotos
ResponderEliminarGracias. Un beso
es el viaje de vuestra vida, recorrer de punta a punta, con tiempo , empaparse de historia, hermanarse con sus habitantes, eso marca de por vida
ResponderEliminar¡Qué linda ciudad! A esta tampoco, me la imaginaba.
ResponderEliminarBesos.
¡¡¡Qué belleza Neo!!Me gustaría conocer esta hermosa ciudad.
ResponderEliminarUn millón de besos.
Morgana.
Si picas mi foto saldrá el blog,me mudé.
Más besos.
Mi querida Moni,me alegra que me hayas encontrado.Cerré mi blog principal por motivos de salud y me quedé con éste otro,que si bién al principio era un blog de terror,fuí adaptándolo ya que el otro se cerró definitivamente.
ResponderEliminarMe alegra volver a saber de tí y de tus maravillosos relatos.
Besos.
Morgana.
Sigue deleitándonos, que a mi me tienes loquito viendo las fotos.
ResponderEliminarUn besote fuerte y feliz semana.
Ni te imaginas lo que disfruto admirando las bellezas de tus fotos.
ResponderEliminarOtra ciudad preciosa, y otro hermoso recuerdo que te acompañará siempre. Besitos.
En ese balcón de Verona estuve y tomé una fotografía, con chino incluido.
ResponderEliminarMuchos besos nena.
Me encanta viajar
Precioso Verona, Neo! Muchas gracias por las fotos. Increíbles :)
ResponderEliminarUn beso fuerte,
Manu UC.