Sumándome a la propuesta de este jueves tan emotivo, traigo un viejo texto que alguna vez dediqué al encanto del ayer que ciertos aromas nos traen cuando llegan de improviso. Espero sepan disculpar que no aporte un texto especialmente escrito para esta ocasión pero el poco tiepo disponible para escribir otra vez ha conspirado en mi contra. Más recuerdos compartidos en lo de Gustavo. HECHIZO DE AROMAS Tienen algunos aromas el poder trascendental de traernos a la mente aquello que ya no está pero habita el inconsciente. Con ese poder total puedo volar hacia atrás llegando al pasado soñado, volver hasta mi niñez instantánea y mágicamente. Consigo ver sin dudar renacer la magia irreal de aquella casa de antaño, los rincones, con la luz, de mis abuelos ausentes. Recorro con todo placer la cocina, espacio vital de aquellos domingos amados y el viaje se torna real por conjuro sugerente. Vuelvo a ser niña otra vez por aromas culinarios: se mezclan tomillo y laurel con canela y pimienta en granos se agrega un poco de miel …y el hechizo terminado. |
Veo que los olores nos motivan a todos a recordar. para mi son fundamentales y estos que nombras los tengo asociados en mi memoria.
ResponderEliminarBello poema Monica para hacernos retroceder en el tiempo.
Un besazo
Los olores son disparadores de recuerdos sin dudas. Y el olor a pan, a torta, a masitas, nos retrotrae automáticamente a la niñez. Son olores inolvidables que uno lleva para siempre en el corazón.
ResponderEliminarUn abrazo vecina ♥
Hola Neo.
ResponderEliminarNo importa cuando escribieras estos bellos versos. Encajan de maravilla. El recuerdo de aromas más profundo de mi niñez se centra en las pastillas de jabón que usaba mi madre. ¡Y cómo dejaba la ropa!
Como pasa el tiempo, poldios.
Un abrazo.
Maat
Es curioso cúantos recuerdos guarda el olfato.
ResponderEliminarYo recuerdo el olor del ganado de la vaquería donde comprabamos la leche recién ordeñada, era en un pueblo y aún no había "explotado" la industrialización y una cosa que me sorprende es que mis recuerdos de niño suelen se en blanco y negro y no lo digo por la TV.
ResponderEliminarUn besote muy gordo.
Como me recuerda mi infancia.Aún hoy, después de algunos años transcurridos,despiertan mis sentidos esos olores de antaño.
ResponderEliminarUn abrazo.
Crecer con olores y sabores, identificando personas y lugares, es un patrimonio de los sensibles que no crecen del todo.
ResponderEliminarSiempre algo mágico se pego a la piel, que no retrotrae una y otra vez al recuerdo.
El relato, bello y adecuado, sin desperdicio.
Besos
Uff si sera cierto esos aromas que tu describes,el pobre sentido del olfato lo lo han postergado en funcion de valorizar otros,pero el esta ahi, agazapado y despierta para nuestra sorpresa cuando menos nos lo esperamos,regozijando,tanto,que nos hace cerrar ojos a veces sin darnos cuenta.
ResponderEliminarcariñitos
Que bonito lo has descrito.
ResponderEliminarEs cierto que muchas veces un olor nos transporta a la infancia y revivimos por un momento esos maravillosos recuerdos
Un beso de Mar
Hola Neo :)
ResponderEliminarLos olores son detonantes de muchos de nuestros recuerdos. Como ya he comentado en otro blog, buena parte de nuestra vida se fragua junto a los fogones o alrededor de una mesa, bien sea en nuestra propia casa o en la de los abuelos
Yo, como tengo menos memoria que un pez, no recuerdo si ya lo leí, en cualquier caso lo he disfrutado.
Un abrazo
que belleza ¡¡¡¡ sabes?? hay aromas , dos te diria que me llevan a una epoca, no digo que fuera del todo buena pero que estan en mi memoria siempre, es el aroma a fresias me recuerda a miniñez, al ir camino al colegio en primavera, y el del tuquito de mi nona , ese que disfrutabamos los domingo¡¡¡¡
ResponderEliminarclaro que viajamos con esos aromas¡¡¡
te tenia abandonada pero siempre es placer leerte moni¡¡¡ besos
Yo soy una entusiasta de toda clase de aromas (agradables, por supuesto)y es completamente cierto que ellos te trasladan muchos años atrás, a la niñez, sobre todo me pasa con las especias y algunas colonias. Me encantó tu poema. Bersitos.
ResponderEliminarLe comentaba a María Jose que son los olores los que me traen recuerdos, pero lo de convertir en pócima los ricos guisos de la abuela es ya pasarse, jajaja, que simpático, miles de besossssssssss.
ResponderEliminarGran parte de mi memoria es olfativa, sin duda alguna. El olor a albahaca, tomillo, tostadas, café, un perfume, las flores... en fin, verdaderamente nos permiten viajar en el tiempo.
ResponderEliminarTus palabra siempre hermosas y vigentes, muy buena excusa para pasear otro jueves juntos.
BESOTES
qué bueno...
ResponderEliminarY todo esto contando con que los humanos tenemos el olfato bastante atrofiado. Imagina lo que sería tener olfato canino, la de recuerdos que se nos iban a amontonar a cada instante¡¡ :D
ResponderEliminarAbrazoss
Si es que hay quien tiene recuerdos de narices... jajaja
ResponderEliminarSaludos y un abrazo enorme.
Es cierto, los aromas de la cocina son los que más me quedaron. También el olor a redes y a puerto, a algas y a madreselva. Olores de la infancia que no se olvidan. Besitos y buen fin de semana.
ResponderEliminarPreciosooo!! escribes genial, me encanta visitarte Neo
ResponderEliminarbesos y abrazos de tu niña gallega
sara
A mí también me dejan mucha impronta los olores.
ResponderEliminarAhora, en esta edad adulta, haber olido ha sido siempre significativo.
Más aun que esas sofisticadas formas de lo urbano.
O lo colorido de la prendas.
O del movimiento elegante de algunas de las màquina, que se han desplazado con velociad por el firme de mis calles.
Màs importante aun, que mi gula.
Y mi libido.
Tésalo
Yo me apunto al conjuro del laurel y del tomillo y de la poquita de miel y... a volverme niña de nuevo, también en la casa de mis abuelos, en el pueblo !que maravilla, ¿verdad?, qué maravilla si se pudiera!. Pero sí, lo has evocado maravillosamente a través de estos versos, efectivamente hay olores que son mucho más que olores, en nuestra mente y nuestro corazón están asociados a momentos, a lugares, a personas... sí, es cierto: mis olores de la infancia, cuando yo era niña, están asociados a la casa de mis abuelos, a las navidades, al pavo asado, a las magdalena enormes de mi abuela, a las orzas llenas de lomo, a los desayunos en aquella cocina enorme... aquellos desayunos de pan tostaito empapado en aceite de oliva y con un poquito de azúcar por encima y leche de las vacas del pueblo que, previamente mi abuela cocía en una olla color rojizo... olor a labanda, a tomillo y a romero al abrir los armarios (mi abuela metia ramitas en unas bolsitas de tela que ella misma hacía para que los armarios olieran bien) y los armarios olian que daba gloria..... sí, sí, hay olores que evocan vivencias, pura vida, imposible olvidarlos.
ResponderEliminarMe ha encantao tu poema Neo: superbonito!!!!!
Un besote de los gorditos y sonorísimos
Me encantan los hechizos de San Juan.
ResponderEliminarCariño, cuál de las de las fotos eres tú? Me he pasado un tiempo mirándolas y disfrutando mi curiosidad.
Un beso, guapa.
UN0 DE L0S 0L0RS, YA YA SE QUE N0 ES AR0MA SPÈCIAMNTE, M0NICA, QU MAS ME ENCANTAN Y QUE CREE0 QUE ME TRAEN A MI PUEBL0 CUAND0 LEJ0S DE EL ME ENCUENTR0, ES EL DE 0L0R A LLUVIA...EL 0L0R A LLUVIA ME DICE DE LAS GENTES DE MI PUEBL0, ME DICE DEEL PUEBL0 EN SI, C0N SUS CASAS DE AD0BE Y D REECIEENTE C0NSTRUCCI0N Y DE SUS GENTES...HE DE REPTIR L0 DE LAS GENTES, PUES PARA MI N0 EXITE EL PAISAJE DE MI PUEBL0 SI D EL QUIT0 A LAS GENTES...
ResponderEliminarMEDI0 BES0, M0NICA.
AHH, Y N0 HAY DISCULPA QUE VALGA¡¡¡¡ HAS AP0RTAD0 ALG0 AL JUEVES, A L0S DEMAS C0MPAÑER0S...¿ACAS0 TE PARECEE P0C0?
Desde el corazón, ese armario sin puertas, se nos escapan a veces los recuerdos inundando de olores, de sabores los sentimientos.
ResponderEliminarEs precioso
Un beso
Preciosa la forma de expresar ese viaje a la niñez desde la percepción de los olores que formaron parte de la misma. Es cierto que identificamos ambientes, lugares, situaciones, a través de los olores que percibimos en aquellos momentos.
ResponderEliminarUn abrazo.
P.S. Mónica, en mi blog te aclaro, por si no vuelves a leerlo, que escribía sobre mi hijo, no sobre mi hermano.
Un abrazo.
Ahora vengo a tus aromas del subconsciente, a las imagenes prendidas como alfileres en tu piel, regreso a la niña y a los juegos, lo hago tarde, disculpa, volví ayer noche de Madrid. Sin embargo nunca es tarde para leer en tus letras perfumes intensos de ayer ante mis ojos, hoy. Bsitooos.
ResponderEliminarHola Mònica!
ResponderEliminarQuè serìa de nosotros si los aromas no activaran nuestros hermosos recuerdos de antaño. Esos tiempos de tanta felicidad, cuando compartimos con personas tan queridas nuestras primeras vivencias... o los tiempos de colegio...
Los aromas evocan todo lo pasado, todo lo hermoso de recordar!
Te dejo un saludo muy cariñoso a la distancia querida amiga!