EL VIEJO SECRETER En destacado rincón el antiguo secreter reina desde siempre en la vieja casa paterna. En sus pequeños cajones, besos guardados, cartas románticas, suspiros…algo de todo aquello ha quedado, permaneciendo como aroma en su madera, laqueada y perfecta, de puro estilo. ¿Qué caricias habrán recorrido aquellas curvas? ¿Qué inquietudes habrán hallado consuelo volcando en letras sus deseos prohibidos? En cada puerta, allí aguardando, dispuestos a salir cuando alguien lo disponga, algún sueño de amores imposibles o quizás otros, que sí lo han sido, acabarán renaciendo en nuevas ilusiones, jóvenes corazones que se sientan igual de enamorados como los que ya no están y alguna vez, sentados frente a sus secretos, buscaron allí refugio. Quien sienta la magia, el embrujo que caben en sus rincones, sabrá reencontrase con un poco de lo que alguna vez fue vivido… y hoy, el tiempo, por capricho quizás, no ha diluido. Hoy conduce http://teresacameselle.blogspot.com/ |
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ResponderEliminarHola Neo.
ResponderEliminarHas escrito un relato encantador. Los viejos muebles se convierten en verdaderos aliados cobijando nuestros sueños y secretos.
Un abrazo.
Maat
Siempre me intrigaron esos muebles llenos de cajoncitos y recovecos, uno tiene la impresión de que va a encontrar algo interesante revolviendo un poco. Lástima que solo los he visto en las películas o en los museos.
ResponderEliminarabrazos vecina!
Muy chulo tu relato Moni. Nunca me había detenido a reflexionar sobre lo bonito de la palabra secreter y sobre lo que pueden encerrar estos muebles, jeje
ResponderEliminarUn abrazo¡¡
Pues sí, un secreter guarda secretos, tiene un poso de historia personal que celosamente esconde. Bello microrelato.
ResponderEliminarSalud y República
¿Para qué sirve un secreter? lo dice la palabra, para guardar secretos en sus rincones, cajones, agujeritos. Si hablara el secreter, contaría muchas cosas, pero nunca lo hará, sabe guardar secretos.
ResponderEliminarEn otro estilo, se parece al escritorio de Dorotea, ambos sugerentes, nostalgicos, encantadores, pero distintos.
Bsito mío y de Quinto, natalí
Impresiona la forma que tienen los viejos muebles de contarnos su historia. A través de los olores que almacena, los grabados, el brillo o no de su madera...
ResponderEliminarEncantador relato, Neo.
Un abrazo
Me gustaría ser chiquita, y quedarme dentro de ese mueble por un rato, solo para escuchar secretos.... que no deben ser diferentes a los que guardamos todo y sí.... posiblemente lo sean. Cómo saberlo?...
ResponderEliminarSiempre un gusto leerte y visitarte socia.
abrazotes y besos.
Entrañable relato. Yo también siempre me he preguntado: - Si estos muebles tueviesen ojos, todo lo que habrán visto. Y esos muebles antiguos son encantadores, esa madrera tan suave y esos torsos redondeados, ¡ah! y sobre todo esos cajones llenos de secretos.
ResponderEliminarUn abrazo
Un escritorio que huele a besos, caricias, suspiros... ha sido testigo de confesiones inconfesables.
ResponderEliminarMieles de cuartillas de Amor, con la marca en la piel, traspasado el papel al compartir con él sentimientos y proyectos.
Bello relato, ternura por los cuatro costados.
Besos
Un precioso relato con olor a añoranza,al pasado más querido, a los secretos que no se han contado.
ResponderEliminarTodo dentro de un mueble, que tiene vivencias de otros tiempos y, que han perdurado hasta nuestros días.
Me ha encantado¡
Saludos.
Conozco los secreter de las películas y en ocasiones he soñado con tener uno. Lo mismo me pasa con las cantareras.
ResponderEliminarUno y otra vuelan en el tiempo y en la imaginación.
El primero hablandonos de atados de cartas con una cinta roja. Tal vez, en el cajoncillo de la derecha, tras unas viejas facturas, una minúscula pistola...
La cantarera, más rural, menos refinada, evoca la falta de agua corriente. El ir y venir de las mujeres con el pesado cántaro a la fuente de la plaza, en ocasiones depositándolos en las alforjas esparteñas de un borrico...
Muy buena entrada, Neo!
Y es que los muebles antiguos tienen un encanto especial, con múltiples funciones, cajones y rinconcitos.
ResponderEliminarUn abrazo y buen fin de semana.
De algún modo, Neogeminis, nos has demostrado que tienen vida, en tu relato se nota como sienten las caricias. De los secretos, ay, de los secretos ni hablamos ¿vale? Suerte en el certamen.
ResponderEliminarBikiños
Que relato tan dulce has escrito.
ResponderEliminarMe gusta tu forma de describir todo lo que ha contenido ese secreter, o lo que imaginas que tuvo depositado en sus pequeños cajones.Y como dice el refran : "El que tuvo, retuvo"
Un besito
Magia por entero, magia de las manos del cielo si hiciera falta....
ResponderEliminarSaludos y un besazo
Buen relato el que nos has presentado.
ResponderEliminarY buenas frases finales. Lo viejo no debe ser suprimido por viejo.
Saludos
Linda entrada.
ResponderEliminarMe has trasladado a mi niñez, a los viejos muebles de mis abuelos...
Besos...!
Esos muebles encierran mucha magia. Un buen amigo el secreter, nunca debelará un secreto.
ResponderEliminarQue linda entrada, siempre pienso, cuando veo este tipo de muebles, cuantos vivencias han pasado por allí.
Buen sábado.
Besitossssssssssssssssssssss.
Si ellos hablaran y nos contaran los secretos guardados en sus cajones ¡que sería de nosotros!, cuantos sentimientos dormidos y cuantos sueños ocultos cobija la madera
ResponderEliminarMe ha gustado mucho tu relato
Un beso de Mar
Si,si,un mueble preciado que sospecho esconde secretos intimos que apenas se vislumbran en el relato.Esperaremos pacientes,quizas mañana...
ResponderEliminarcariños,hoy, racimos de glicinas
Tiene mucho de poesía este relato, sobre todo en su último párrafo. Cuántos secretos y recuerdos guardamos en nuestros cajones.
ResponderEliminarUn beso.
Cada objeto, sujeto, ánima, cosa tiene su energía y guarda secretos, simplemente para hacernos sentir las cosquillas de la curiosidad cual niños.
ResponderEliminar_____(¯`v´¯)__░░
ResponderEliminar____(¯`(●)´¯)░
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Sin dudas que deben tener muchos secretitos para contar.
Gracias por pasar por mi rincón.
Besitos.
Laury.
Hola Neo, estos días apenas he podido estar por aquí. Me falta mucho que leer tuyo, pero este secreter me ha llegado al alma, en casa de niña tuve uno, estaba llena de cajoncitos y pequeños escondites donde guardar cartas o pequeños tesoros, por desgracia, su madera se picó, y nos tuvimos que desprender de ella. He querido tener uno de ese estilo, todos los que me conocen lo saben, pero no tengo donde ponerlo, el piano de mi hijo se llevó mucho espacio. En mi dormitorio, desde donde te escribo, busqué durante meses, pero no encontré en color blanco, es decir uno si, pero era muy pequeño y no tenía donde guardar el portátil, así que sigo soñando con un secreter. Un beso y feliz domingo.
ResponderEliminarQue hermoso Neo, tan lleno de sentimientos puede estar un simple mueble!!!
ResponderEliminarYo podría haber escrito la historia de mi PC, pero por suerte el técnico se la llevó antes y asi evitó que me echen de los sabados literarios por grosera jaja. Hoy me la dieron provisoria, el lunes me la secuestran otra vez para terminar el tratamiento de resucitación.
Abrazotes gigantes!!
Preciosa y nostálgica historia. Estos muebles me fascinan. Un gran beso.
ResponderEliminarme rec0n0zc0 seguid0r de pr0gramas de es0s de casas encantadas, de es0s d ep0ltergueis 0 c0m0 se escriba, de es0s d e0vnis, de es0s pr0gramas me rec0n0zc0 seguid0r...ese neceser esta impregan0, asi dicen l0s parann0stas,de las almas que a el se acercar0n un dia, per0 de almas bien desgarradas de am0r 0 bien desgarradas p0r...p0r l0 que sea. pues n0 se suelen quedar l0s muebles asi c0m0 asi c0n l0s grit0s de l0s que ya se fuer0n bien pal 0tr0 mund0, bien pal 0tr0 barri00...que mal fari0 el de este neceser que me he imaginad0, el de tu relat0...¿l0 vestim0s c0n sabana blanc0 y c0n v0ces de ultratumba, m0nica?
ResponderEliminarmedi0 bes0.
La razòn de tantisima pressencia, es la belleza de este secreter.
ResponderEliminarSe me ha ocurrido, que su estilo es de un Luis XV.
Un saludo,
Tèsalo
En casa de la abuela hay un armario tallado y cuando paso las manos por las hojas de las puertas aún me parece que puedo oir su voz. Un abrazo Neo, genial como siempre tus letras
ResponderEliminarLos muebles antiguos nos envuelven con su magia. Lástima que algunas personas no sepan apreciarlo.
ResponderEliminarMuy buen relato.
¡Besitos!
Me encantan esos muebles llenos de cajoncitos que sirven
ResponderEliminarpara guardar pequeñas-grandes cosas.
Me imagino el corazón como un gran secreter :D
Un besito
Lala