Temerosos de andar
los débiles esperan
a que la suerte les sonría
y les sea propicia
la vida.
Pero sentados a la vera
de lo que creen
es un atajo,
atascados en su cobardía,
los ciegos de corazón
renuncian al riesgo
y postergan
indecisos, el avanzar,
hasta el final de sus días.
Se van muriendo
sin aventurar,
perdiendo la oportunidad
que a veces pasa rauda
y otras
hasta los aguarda,
a la vera del camino.
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Tienes toda la razón Neo,en esta vida el que no se arriesga no gana,p pierde.Pero al menos lo habrá intentado.Recién levantada me encuentro con esta reflexión y no puedo pensar demasiado.
ResponderEliminarBesitos.
Cierto, muchos se muestran ciegos, sordos o cobardes ante lo que puede significar un cambio radical a su patética vida. El miedo les atenaza las entrañas.
ResponderEliminarComo siempre, has hecho de una verdad como un puño, un hermoso poema. Te felicito.
Un abrazo
Se está más cómodo y quizás más seguro con los pies colgando al borde del camino pero desde luego el resultado tampoco va a ser el mismo. A veces simplemente un empujoncito... Un abrazote bien fuerte siempre : )
ResponderEliminarBello texto. Y además cierto.
ResponderEliminarLa fortuna sonrie a los valientes!
Un abrazo.
Creo que no hay suerte para el que no se mueve.
ResponderEliminarLa cobardía o el simple conformismo...Hay quien pasa por aqui sin saber ni para qué...
Un beso
P
Hay veces que nos quedamos atascados cuando después de una y mil batalla luchada, una a una se van perdiendo, dejando toda optimismo en un olvido irracional. Otras veces, es el propio miedo el que hace que nos envalentonemos más, y así abrir puertas esperanzadoras. Quizás quien se quedó atascado, no tuvo nunca a su lado, nadie que le ayudara a dar ese empujón. Ufffff paro de escribir, me enrrollo, hoy es de esos días en los que una se estancó, así que gracias por hacerme reflexionar jajaja.
ResponderEliminarUn montón de besos para que no te falten, preciosa.
Basileia
Hay que luchar y nunca quedarse atascado, porque es una muerte anunciada.
ResponderEliminarBesos.
Hay gente que no quiere avanzar y su diagnóstico: cobardía
ResponderEliminarOtros, aunque ponen todo su empeño no pueden. Se aferran con todas su fuerzas por adelantar una pierna, por arrebatar un solo centímetro a su destino. Y no pueden.
O no les dejamos...
Triste es el destino de quienes no pueden arañar una migaja de esperanza.
Quizás deberiamos darles un empujoncito. Hay gente cuyo corazón no sabe o no puede andar.
ResponderEliminarSaludos
Buenos días mi querida amiga, vine a desearte un hermoso mes de abríl, en esta vida hay que ser arrisgado, xq el que no lo hace nunca se va a enterar que hubiese pasado.
ResponderEliminarUn abrazo.