miércoles, 26 de agosto de 2020

CADA JUEVES UN RELATO: 8 años, 13 argumentos

Para celebrar el aniversario del blog del amigo Demiurgo y sumándome a su propuesta juevera de elegir entre una serie de argumentos que expone en su blog, dejo mi aporte de esta semana y los invito a pasar a leer todos los relatos.

P.d Feliz aniversario Demi!!

ENTRE LA VIGILIA Y EL SUEÑO (argumento número 5)

Después de varios días sin dormir, gracias a las pastillas que le prescribió su médico, pudo conciliar el sueño. Al menos, una duermevela poco profunda en la que la conciencia de estar despierto se fue diluyendo lentamente, pasando a ser -en cambio- una pastosa nubosidad en donde su identidad parecía flotar sin exigencias ni rumbos prefijados hacia sustratos del subconsciente que jamás había visitado antes.

Luego de un breve lapso que no sabría dimensionar, comenzó a sentirse cómodo en aquella levedad irreal en la que se sumergía. Fue en esa instancia en la que por primera vez sintió tambalear sus habituales certezas, aflorando en su mente como vagas moralinas irrisorias, adquiridas desde su infancia sin más sustento que la aceptación ciega a la que fue sometido.

Enfrentando tentaciones filtradas en su subconsciente desde épocas arcaicas, el durmiente se dejó llevar por ellas con la tranquilidad de saber que las estrictas reglas aprehendidas no tenían validez en aquel universo. Para diluir totalmente los últimos resquicios de sensatez y culpa que pudieran quedar en su conciencia, una máscara de extraños poderes le fue proporcionada para que, al usarla, diera rienda suelta a su más oscura naturaleza sin cuestionamientos ni pudores.

Alentado por el alto realismo de lo que allí se le ofrecía, presenció mientras estuvo en aquel plano onírico todo tipo de excesos: abominaciones impensadas, violencias sádicas, perversiones sin límites a las que le invitaban a sumarse. Y sumergido en un baño de exuberancias e inconciencia, sin lazos que lo frenaran, el durmiente consintió y participó.

A la mañana siguiente cuando el tibio sol asomaba ya por la ventana, el hombre fue paladeando el blando retorno a la cotidianidad mientras en su boca persistía el sabor agridulce de las frutas prohibidas que había probado. A medida que la lucidez ganaba paso en medio de los oníricos ecos que aún retumbaban, un objeto inesperado captó su atención recién despabilada mientras un mudo grito de espanto intentaba brotar de su garganta: una máscara pegajosa, aún chorreante de fluidos inciertos, reposaba sobre su mesa de luz como signo inequívoco de que lo soñado había resultado ser tan real como lo que ahora comenzaba a experimentar.


miércoles, 19 de agosto de 2020

CADA JUEVES UN RELATO: STEAMPUNK

Este jueves Mag nos propone desde su blog meternos en la temática Steampunk. Buscando inspiración acorde me he topado con un excelente ilustrador que aborda este tipo de estética y que quisiera difundir. Espero les gusten sus imágenes. Para leer más relatos, pasar por el blog de Mag.

IMÁGENES DE VLADIMIR GVOZDARIKI

ÉMULOS

Millonario excéntrico, hábil ingeniero y científico experimentado, había revolucionado la industria con sus diseños de avanzada utilizando la fuerza del vapor como impulsora de sus ingeniosas maquinarias.  

Retirado en autoexilio en su paradisíaca isla privada, huraño y antisocial al extremo de rechazar todo contacto humano, aprovechó su riqueza y sus conocimientos para desarrollar en secreto su más ambicioso proyecto: emular mecánicamente las más equilibradas formas de la vida salvaje - insectos y animales- dotándoles de movimiento y autonomía mediante elaborados mecanismos de ajustada relojería. La ventaja de sus diseños sobre los naturales, pensaba, sería evitar las indeseables consecuencias de la descomposición orgánica de los seres vivos, o sea, esquivar la certeza de la muerte.

La primera parte de su trabajo consistió en estudiar puntillosamente las características de los especímenes naturales en forma directa. Cientos de ejemplares de langostas, grillos, peces, pájaros, ranas, tortugas, fueron pacientemente diseccionados y analizados bajo su lupa experta durante años, buscando comprender en detalle el funcionamiento de cada pliegue, cada articulación, cada inserción fisiológica características de las especies analizadas, para luego volcarse con ímpetu creativo a la producción artesanal de distintos autómatas mecánicos, con la ambiciosa premisa de superar a la naturaleza en su propio juego: el arte de crear.

Con el paso de los años y luego de cientos de análisis resectivos fue mejorando la elaboración de sus diseños en forma extraordinaria, emulando a los naturales con un alto grado de precisión. Como lógica consecuencia, a medida que sus autómatas mejoraban, la vida natural de aquel paraje comenzó a menguar, ya que por sus experimentos fueron extintos todos los insectos y animales que originalmente lo poblaban. La selva fue perdiendo su variedad y espesura, la tierra otrora fértil se fue resquebrajando, el clima, tornándose menos húmedo y hasta las corrientes de agua disminuyeron su caudal.

Ahora, complacido con su obra, el excéntrico ingeniero celebra su triunfo: sus autómatas, émulos de los animales originales, deambulan a su alrededor ajenos a la amenaza de la muerte, según había soñado. Eso sí, lo hacen en un entorno cada vez más árido y desolado, similar al que ya siente en su propia alma.


miércoles, 12 de agosto de 2020

CADA JUEVES UN RELATO: OBJETOS

Esta semana Alfredo nos propone armar relatos desde el punto de vista de los Objetos. Pasar por su blog para leer todos los textos participantes.

TRISTE DESTINO DE UN PINCEL SIN ESTRENAR (dedicado a una de mis tías)

Entre pomos apretados de óleos ya resecos y acuarelas olvidadas, descansa en un costado de la vieja caja de pinturas, un pincel sin estrenar.

No comprende el pobre por qué ha sido ahí mantenido desde esa lejana noche navideña, cuando entre sonrisas y descorches fuera recibido por su flamante dueña, una simpática viejecita de manos temblorosas, quien con sinceridad celebraba haber recibido como obsequio aquel estuche con tubos de acrílicos, pinceles y cartones especiales.

El inesperado regalo llevaba el firme propósito de incentivarla a retomar aquello que en su juventud había sido una pasión y que con los años resultó constantemente postergado con pretextos absurdos: falta de tiempo, de materiales, de un lugar con luz adecuada… en fin, injustificadas razones para no hacer lo que siempre dijo disfrutar más allá de sus rutinas de ama de casa simple y solitaria.

Entre risas y papeles de envoltorios, aquella noche de fiesta prometió con sinceridad darles su merecido uso, sin más excusas ni postergaciones, cosa que no cumplió.

El tiempo siguió su curso, los temblores en sus manos aumentaron, la procrastinación se mantuvo aun cuando las excusas ya no encontraran sustento.

El traslado al geriátrico fue tan inevitable como mínimo el equipaje que optó por llevar. Por supuesto no empacó ni la vieja caja de pintura ni los nuevos implementos que quedaron lastimosamente sin inaugurar.

Al poco tiempo la viejecita murió entre aquellas cuatro paredes impersonales. Sus cosas fueron repartidas entre quienes más amó. La lógica heredera de sus artilugios artísticos fue su  sobrina nieta, que por ese entonces -como ella lo había hecho en otro tiempo- estudiaba bellas artes.

Por los caprichos del destino y los avances de la tecnología, no fueron los pinceles los que eligió la novel artista para materializar sus obras. Prefirió en cambio algo muy alejado de aquellas pátinas de pigmentos y pinceles delicados que recibiera como emotiva herencia: el multifacético arte digital fue en el que se sumergió con entusiasmo, mucho más acorde a las demandas de su época.

No conoce aun aquel pincel jamás embebido cuáles fueron los motivos de su no iniciación, ni qué ventajas puede tener el diseño digital sobre su tradicional mundo. Lo cierto es que hay algo en él imposible de emular y eso lo consuela. Tal vez alguien impensado pronto ensaye su trazo y se anime a redescubrirlo.


miércoles, 5 de agosto de 2020

CADA JUEVES UN RELATO: El mundo del plop

Como esta vez las musas no me han respondido y no quiero dejar de sumarme a la muy original convocatoria juevera que desde su blog nos hace la amiga Dorotea, me tomé la libertad de buscar por la red algunos chistecitos bastante tontuelos entre objetos inanimados que, de alguna manera, pertenecerían a ese mundo raro del plop que nos ha presentado nuestra anfitriona. Para leer todos los relatos, dar clic aquí.




DISLATES EN EL MUNDO DE LOS PLOP 

chistes tontos (@kaleddanielnass) | Twitter


¿Qué le dice el lápiz al sacapuntas?
Esta relación está acabando conmigo.

¿Qué le dice el libro de Matemáticas al de Lengua?
¡Tengo muchos problemas!

¿Qué le pregunta una linterna a otra linterna?
¿Cuál es tu nombre de pila?

¿Qué le dice el mar a uno que se está ahogando?
¡Nada!

¿Qué le dice un ojo al otro ojo?
¡Tan cerquita y no nos vemos!

¿Qué le dice una pared a otra pared?
Nos vemos en la esquina.

¿Qué le dice un espagueti a otro?
Oye ¡mi cuerpo pide salsa!

¿Qué le dice el fósforo al cigarrillo?
Por ti me consumo.

¿Qué le dice un cuadro a la pared?
Perdón por darle la espalda.

¿Qué le dice la cuchara al azúcar?
Nos encontramos en el café

domingo, 2 de agosto de 2020

EL OLIVO


Primer aceite de oliva Virgen Extra procedente de olivos centenarios  recuperados

(imagen sacada de internet)

Crece
el paciente olivo milenario
mirando transitar el tiempo
y entre sus pliegues
de añares y cortezas,
la pequeñez  de un viajero
que pasa contemplándolo
desde cerca, emociona
y se evidencia haciendo
nacer dos lágrimas:
una al viajero y otra
al propio árbol
que al observarlo recuerda
otros lejanos tiempos
y otros viajeros solitarios.