Sumándome a la propuesta de Sindel de esta semana
LA ETERNIDAD, EL TODO Y LA NADA
La Eternidad
no es abarcable
en la perspectiva
-acotada- de nuestra
dimensión humana.
Se nos escapa
-por trascendente-
su alcance
su implicancia
y su medida.
No es compatible
su concepción
con nuestra escala.
En la inmensidad
de un Todo trascendente
somos seres
tan sólo diminutos
y apenas breves
nuestra existencia,
importancia
y consecuencia.
Somos instantes
irreverentes y disolutos
dentro de un pulso conductor
que ata el tiempo
con el espacio
en nuestro karma.
Por nuestra innegable
impericia
a la hora de situarnos
no nos es dada
esa noción inabarcable
de comprensión
ni de lo Eterno
ni de la Nada
o lo Infinito.
Qué pequeños somos frente a esa inmensidad de lo eterno, que frágiles ante lo infinito! Excelentes versos para reflexionar y tomar consciencia de el lugar que ocupamos en el espacio, más allá de creernos tan enormes.
ResponderEliminarUn beso enorme.
Y nos consideramos importantes, y algunos hasta genios y total no somos nada mas que motas de polvo. Menos mal que lo has dicho en verso y con elegancia porque ahora me siento diminuta. Saltos y brincos
ResponderEliminarY los hay que niegan que existan tanto el espacio como el tiempo, y defienden que son constructos de la cortedad de la mente humana porque sin ellos no sabríamos situarnos, nuestro mundo no pordía existir pensando en el "de paso", de ahí que desde los primeros enterramientos tengamos objetos de uso cotidiano cerca.
ResponderEliminarQué bonito el desarrollo de tu entrada.
Beso.
Tienes razón, es una palabra tan grandiosa que no la podemos abarcar, se sale de nuestros esquemas humanos, somos demasiado pequeños para comprenderlo.
ResponderEliminarUn abrazo
En realidad nosotros somos solo una pequeña parte de un gran todo que lo envuelve, pero en nuestra osadía nos creemos grandes y poderosos.
ResponderEliminarbesos
Diminutos, vinimos sin nada, nos iremos sin nada. Aun ahí quién se cree algo...
ResponderEliminarBesos.
Ninguna de las palabras es abarcable ni eternidad ni para siempre...
ResponderEliminar¿quien sabe qué psará mañana?
Somos solo un suspiro, un instante, dentro de la inabastable eternidad. Besos.
ResponderEliminarHola; aquí aparecen verdades como puños. Tu texto es una cura de humildad para la condición humana. Se carga de tensión, pero tensión lírica.
ResponderEliminarSaludos. Pablo.
Lindo texto, muy reflexivo. La vida es efímera, no somos nada ante la basta eternidad.
ResponderEliminarAbrazo
Toda la razón del mundo...según como conocemos el mundo, o como nos equivocamos a creer que es, no podremos entender el concepto de infinito ni de eternidad....pero quien sabe...
ResponderEliminarBesoss..feliz jueves
Eso es lo que somos frente al mundo, tan diminutos, tan pequeños en instantes efímeros, y hoy somos pero mañana nada seremos, esa es la única realidad.
ResponderEliminarUn besazo.
y sin embargo cada hombre lleva en su interior, la esperanza de dejar su huella eternamente
ResponderEliminarNada somos, pero aun así intentamos cada día dejar señales.
ResponderEliminarUn abrazo